Las frases de Massot que desataron la furia en el Congreso
La primera comisión importante de la reforma previsional en el Congreso terminó con diputados como el kirchnerista Agustín Rossi esforzándose para separar a la gente y evitar que el encuentro termine en mayores problemas.
Nicolás Massot, por el oficialismo, defendió el proyecto y acusó a los legisladores de Unidad Ciudadana de haber dejado el país destrozado. “Ustedes prendieron fuego la casa y ahora se quejan del olor a humo”, gritaba mientras el grupo de los peronistas más radicales le llamaba de todas las maneras posibles.
Aunque incluso se acercó algún par suyo a tratar de que se callara, Massot hablaba cada vez más fuerte: “No hay derecho adquirido cuando las jubilaciones se pagan con la máquina de hacer billetes. Donde estaban los carteles cuando esperaron a que murieran 300.0000 jubilados esperando a cobrar lo justo. ¡Háganse cargo!”, los fustigó.
Massot fue más allá y animó a su bancada a resistir las críticas de los kirchneristas y los sindicatos. “No sintamos culpa, estamos arreglando lo que otros no tuvieron huevos para arreglar, estamos dándole un destino a este país”, agregó, para marcar un quiebre.
Desde el otro lado, la oposición kirchnerista le respondía: “Devolvé la guita a los jubilados”, a lo que Massot contestó: “¿Quieren ir por la guita? ¡Vayamos a Marcos Paz y a Ezeiza! ¡Vamos todos juntos!”, en mención a las dos prisiones donde están los más conocidos kirchneristas encarcelados por presunta corrupción.
La reforma llevará muy probablemente a un ajuste de las pensiones en el marco de una inflación que continúa desatada -este año superará el 25% y en diciembre se ha vuelto a descontrolar- y hace perder rápidamente el poder adquisitivo. Incluso cuando desde la oposición se le preguntó al ministro de Hacienda Nicolás Dujovne cuánto ganarían los jubilados bajo la actual fórmula y cuánto a partir de la reforma, el funcionario de Mauricio Macri se limitó a contestar que no habían hecho la cuenta.
El momento cumbre inicial de la polémica por la reforma se vivió la semana pasada, cuando el diputado oficialista Pablo Tonelli dijo que los jubilados «podrían perder plata pero no poder adquisitivo» con el proyecto. Con una inflación del 25%, esa afirmación mereció decenas de insultos.