Encefalomielitis equina: se estableció la vacunación obligatoria en todo el país

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) estableció la vacunación obligatoria contra la encefalomielitis equina del este y del oeste. La medida rige para todos los équidos que tengan al menos dos meses de vida.

Así, la resolución indicó que la totalidad de los équidos deberán tener vigente la vacuna y que aquellos que no hubieran recibido la primera dosis, deberán hacerlo dentro del plazo de diez días.

Asimismo, la nueva normativa establece que cada equino deberá contar con el certificado de vacunación a fin de acreditar la vacuna. El mismo deberá ser emitido con firma y sello de un veterinario matriculado que actúe de forma particular o a través de un ente sanitario registrado en el Senasa. 

Además, el certificado tendrá que expresar los datos de interés que identifiquen al animal involucrado y la información de la vacuna aplicada.

Con respecto a las condiciones de inoculación, en los primovacunados se deberá implementar un refuerzo en los plazos estipulados, según prescripción del laboratorio elaborador. Una vez completado el esquema de primovacunación y refuerzo, la revacunación se efectúa de forma anual.

 

Brote de encefalomielitis equina: el riesgo de contagio y recaudos a adoptar

 

 

Brotes de encefalomielitis equina

Cabe destacar que esta nueva medida tiene como objetivo evitar los efectos negativos del virus, preservar el bienestar animal y minimizar las pérdidas productivas para el sector implicado.

Es que distintas provincias del país comenzaron a experimentar en diciembre brotes de encefalomielitis equina, por lo que ahora la vacunación es obligatoria. 

 

 

De hecho, esto fue así hasta 2016, cuando bajo la gestión del expresidente Mauricio Macri se determinó que la vacuna ya no sea de aplicación obligatoria. Esto provocó además una baja tal en la demanda, que se dejó de producir la vacuna.

Argentina no registraba casos de encefalomielitis equina desde 1988 y entre diciembre de 2023 y enero de 2024 ya se registraron incluso víctimas humanas a causa del virus, que se transmite a través del mosquito ‘culex pipiens’.