Sergio Maldonado es el hermano del joven desaparecido hace ya once días en un desalojo que organizó Gendarmería contra una comunidad mapuche en la provincia de Chubut. En el marco de la multitudinaria marcha que se realizó en la ciudad de Buenos Aires, el familiar criticó el proceder del gobierno nacional en el caso.
La repercusión del hecho alcanzó rápidamente dimensión nacional, sobre todo porque la protesta mapuche está a la espera de que Argentina decida si extradita o no al líder de la comunidad Cushamen, Facundo Jones Huala, a Chile, país que quiere juzgarlo por “terrorismo”. El conflicto de los mapuches se renovó en los últimos meses en el marco de una disputa de tierras con el empresario italiano Luciano Benetton.
Desde el ministerio de Seguridad rechazaron que Maldonado se encuentre desparecido, una figura con fuertes resonancias políticas por la memoria de la dictadura. “Nosotros hemos hecho una tarea con cada uno de los gendarmes, analizando la conducta y no tenemos ningún indicio de que Gendarmería Nacional se lo haya llevado. Estamos buscándolo y le pedimos a la comunidad Cushamen que deje entrar a las fuerzas de seguridad”, dijo la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
En pocas horas, Sergio Maldonado habló con la prensa y respondió lo dicho por la funcionaria de Macri: “Nos acusa a nosotros, cuando en realidad debería buscar por otro lado. Es grave que el Estado, que nos tiene que defender, siga negando todo”, sentenció.
“Parece que uno fuera culpable e interfiere para que mi hermano no aparezca. Los controles que hicieron el jueves, lo tendrían que haber hecho una semana atrás.”, reaccionó Sergio Maldonado. “La mentira tiene patas cortas. El tema se les fue de las manos y ya no saben qué hacer y lo van estirando”, sumó a continuación
Luego de lo expuesto por Bulrrich, Gastón Chillier, director ejecutivo del CELS, contó su parecer al estar presente en las pericias realizadas en Gendarmería. “Hay muchas anomalías”, señaló en una entrevista con el diario El País de España. “Desde el primer día hay una declaración de una miembro de la comunidad donde dice que hay un desaparecido, incluso con el nombre. Pero el allanamiento se realizó nueve días después”, describió el investigador en primera instancia.
De inmediato, Chillier agregó. “Cuando hablaron pusieron en cuestión que la víctima haya estado en el lugar y también la voluntad de la comunidad en cooperar. Daría la sensación de que el Gobierno, en vez de asumir la investigación y la responsabilidad como jefe de la fuerza policial sospechada, trata de cargar sobre la comunidad”, afirmó.
Las advertencias no nacieron sólo de esos apellidos. “Esto es una emergencia social y política”, expresó al citado medio español el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel: “Hay una fuerte represión a la comunidad mapuche, no solo con este gobierno, ya viene de antes. Hoy hay un desaparecido que no es mapuche, es Santiago Maldonado, de quien tenemos que ver donde está y no hay respuesta del gobierno. Hasta el momento están tratando de hacer evasivas”, expresó.
En la misma línea fue el exJuez de la Corte Suprema, Eugenio Zaffaroni: “Hay algo que me hace sospechar lo peor y es la actitud del oficialismo. A cualquiera le puede aparecer un accidente. En tal caso, la actitud correcta y honesta de un gobierno es poner las cartas sobre la mesa e investigar. Pero veo una táctica de encubrimiento y distracción, que me hace acordar mucho a la metodología de la dictadura, sobre todo, con la estigmatización como terrorista del pueblo mapuche, de los cuales solo le falta decir que son aliados del estado islámico”, sentenció.