El fin de semana largo de octubre movilizó a 1,4 millones de turistas, mientras que el impacto económico tuvo una baja real del 33,3%. Así se desprende del informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
El gasto total ascendió a unos $228.479 millones y viajó un 7,1% menos que el año pasado. En 2023, no obstante, el feriado fue de cuatro días.
Además, la entidad observó que el tipo de cambio en aquel momento volvía a Argentina más conveniente para el visitante internacional.
Este año, la ausencia del programa Previaje se compensó “por el incremento en la oferta de torneos deportivos, culturales y un potente calendario de encuentros”, de acuerdo al informe.
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Así, según las cifras de CAME, frente al mismo fin de semana largo del año pasado, viajaron 7,1% menos de personas y el impacto económico tuvo una baja real de 33,3%.
Los turistas desembolsaron, en promedio, $67.518 diarios cada uno, y la estadía media fue de 2,4 días (vs. 3,3 jornadas el año pasado).
Menor poder adquisitivo
“El visitante este año fue mucho más austero, notándose el menor poder adquisitivo. Viajó, pero priorizó las actividades gratuitas y redujo su demanda gastronómica. Fue común ver ciudades con ocupación hotelera en niveles muy altos y a la vez, confiterías y restaurantes semivacíos”, precisaron.
Respecto a la costa atlántica bonaerense, CAME sostuvo que entre las ciudades más concurridas estuvieron Mar del Plata, Cariló y Mar de las Pampas. La región fue uno de los principales destinos.
Allí se destacaron las fiestas populares, como la Fiesta Nacional de la Diversidad Popular en Villa Gesell y la 58ª Fiesta Nacional de la Corvina Negra en San Clemente del Tuyú. En Mar Chiquita también hubo actividades gratuitas y al aire libre para disfrutar en familia.