Icono del sitio Telégrafo

El rompehielos Almirante Irízar zarpó para realizar su primera prueba de mar

El emblemático buque de la Armada Argentina zarpó del Complejo Industrial y Naval Argentino rumbo a mar abierto para realizar la prueba de mar luego de las refacciones a las que fue sometido, tras la cual navegará con proa al sur, para volver al hielo antártico y concluir así sus exámenes.

Un equipo compuesto por 21 profesionales y técnicos de la Armada Argentina, del taller Tandanor y de la empresa noruega DNV (Det Norske Veritas), encargada de las mejoras en el buque, navegará inicialmente ocho días para corroborar su accionar y sus diferentes sistemas en aguas profundas a fin de ser ser certificado por la firma escandinava.

El sistema de control y monitoreo de alarmas, una nueva incorporación al Irízar con más de 5.500 puntos de control, será verificado durante el protocolo de automatización que tiene por objetivo operar con máquinas desatendidas. Asimismo, los testeos relativos al puente integrado de mando también serán efectuados a lo largo de la travesía.

El rompehielos operará con sus aeronaves orgánicas, en este caso un helicóptero Sea King para hacer los testeos de su cubierta de vuelo, luces de helipuerto y sistema de combustible verificando que estén plenamente operativos.

Durante la travesía se probarán los sistemas de generación y propulsión a su máxima carga y potencia, así como también la respuesta de su sistema de gobierno y la maniobrabilidad del buque alternando rumbos con diferentes grados de pala de timón.

El navío desarrolla actividades logísticas y científicas, para lo cual dispone de 13 gabinetes científicos que permiten realizar tareas de glaceología, meteorología, química, microbiología, biología marina y oceanografía, lo que implica integrar a la tripulación unas 50 plazas extras destinadas a profesionales afines a la investigación.

 

Salir de la versión móvil