Costa Esmeralda: Luz y Fuerza reclama la reincorporación de despedidos

El Sindicato de Luz y Fuerza Mar del Plata denunció que el barrio privado Costa Esmeralda no acató una conciliación obligatoria en el marco del conflicto por dos trabajadores despedidos. Aseguraron que se trata de “prácticas antisindicales” y desvinculaciones “discriminatorias”.  

La medida, que dictó el ministerio de Trabajo bonaerense, obliga a la empresa a retrotraer la situación al inicio de las actuaciones y a permitir el ingreso de ambos empleados.

 

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Según el gremio, la firma que administra el barrio privado -ubicado en el partido de La Costa, a diez kilómetros de Pinamar- mantuvo las restricciones y bloqueó el acceso de los dos despedidos durante los últimos días.

El secretario gremial de Luz y Fuerza Mar del Plata, Lucas Tremonti, explicó que el sindicato ya elevó una presentación por incumplimiento ante el Ministerio. También anticipó nuevas gestiones para que distintos organismos constaten el funcionamiento interno del barrio y las condiciones laborales del personal. 

“Ya denunciamos al Ministerio este incumplimiento. Además, solicitaremos una audiencia ante el Organismo de control provincial, OCEBA, para que certifique el modo en que se está distribuyendo la energía dentro del barrio y si cumple la reglamentación, y solicitaremos una inspección del Ministerio de Trabajo para que corrobore las condiciones laborales dentro del barrio”, afirmó el dirigente. 

Tremonti remarcó que “Costa Esmeralda incumple acuerdos con nuestra organización sindical, no acata medidas del Ministerio de Trabajo y realiza persecución hacia los trabajadores de Luz y Fuerza Mar del Plata”. 

 

 

Acusaciones de persecución sindical

El gremio sostuvo que el conflicto responde a prácticas antisindicales y a irregularidades persistentes. Según la organización, la semana pasada la empresa desvinculó a dos afiliados durante el traspaso de la Asociación Civil Costa Esmeralda al nuevo fideicomiso, pese al compromiso de garantizar la continuidad del personal. 

Para el sindicato, ambos casos constituyen despidos discriminatorios, enmarcados en una serie de incumplimientos previos. Así, el gremio enumeró problemas en materia de seguridad e higiene, la falta de conformación del comité mixto obligatorio y observaciones sobre el manejo de actividades sensibles relacionadas con la distribución interna de energía eléctrica.

Cabe destacar que uno de los trabajadores afectados ejerció funciones como delegado gremial hasta el vencimiento reciente de su fuero sindical. Al respecto, el sindicato señaló que la empresa esperó esa fecha para concretar la desvinculación, lo que considera “un indicio claro de persecución”. 

En tanto, el otro empleado entre los despedidos en Costa Esmeralda también tuvo participación sindical activa, lo que refuerza para el gremio el patrón discriminatorio. En este contexto, Luz y Fuerza exige la reincorporación inmediata de ambos trabajadores y mantiene el estado de alerta a la espera de la evolución del conflicto.