La inflación no se detiene en prácticamente ningún rubro comercial de la economía y en este mes de febrero, a semanas del inicio de un nuevo ciclo lectivo, la cooperativa Consumidores Argentinos realizó un relevamiento para dar cuenta de las subas existentes en el rubro de la canasta escolar.
Aunque los datos fueron obtenidos en negocios minoristas de la ciudad de Buenos Aires, las estadísticas son referenciales para buena parte del resto del país, donde incluso los impactos de los aumentos suelen ser más voluminosos.
El representante legal de Consumidores Libres, Héctor Polino, detalló que los productos de la canasta escolar tuvieron un aumento del 23.76 por ciento respecto al año 2017.
El relevamiento comprende 37 productos de librería, más 4 artículos de indumentaria escolar. En ese último ítem, por ejemplo, los guardapolvos (talle 10) que valían en promedio $320 el año pasado, ahora cuestan $400, un 25% más.
Entre los artículos que elevaron mucho su costo en el mercado, figuran el repuesto de 96 hojas, los lápices de colores, los compás metálicos, las gomas de borrar, el papel glacé, la cinta adhesiva y los clásicos rótulos que sirven de etiqueta para las asignaturas. Son productos que muestran subas por arriba del 40%, en varios casos, cercanos al 50%.
En cuanto a las mochilas se ofrecen de diferentes diseños, medidas y calidades y los precios oscilan entre los $ 200 y los $ 1500.