Durante este mes de noviembre que acaba de comenzar, River y Boca definirán la copa Libertadores 2018 en lo que ya se denomina “el partido de todos los tiempos”, sin dudas, el superclásico argentino más taquicárdico de la historia.
Los dos rivales argentinos dejaron en el camino a Palmeiras y Gremio de Brasil, pero este último equipo presentó una queja ante la Conmebol para que la serie ante River se le de por ganada, luego de que el técnico millonario incumpliera una dura sanción impuesta por el organismo sudamericano durante el partido definitorio de esa semifinal disputado en Porto Alegre el martes último.
Este jueves, la Conmebol confirmó las fechas de los cruces finales, pero no definió el lugar ni el otro equipo que protagonizará el partido desenlace, que le correspondería a River, por haber terminado mejor posicionado en la primera fase de la competencia.
La ida se jugará el próximo sábado 10, en la Bombonera, y la revancha sería en el Monumental, dos semanas después.
La primera final de la CONMEBOL Libertadores 2018 será disputada el sábado 10, a las 16 hora local, en el estadio del club Boca Juniors. La segunda final se jugará el sábado 24, también desde las 16.
— CONMEBOL.com (@CONMEBOL) November 1, 2018
La Conmebol había estipulado originalmente que el partido definitorio se jugara el 28 de noviembre, pero como entre el 30 de este mes y el 1º de diciembre se realizará en Buenos Aires la cumbre del G20, los organismos de seguridad pidieron que el partido se anticipe.
Ambas finales, que se jugarán solo con público local, serán además las últimas a ida y vuelta de la Libertadores, que desde 2019 instalará el sistema de único partido en sede neutral.
Será, además, la definición más antagónica en la historia del máximo torneo sudamericano, que en sólo dos ocasiones tuvo como finalistas a equipos de un propio país, los brasileños San Pablo-Atlético Paranaense en 2005 e Inter-San Pablo en 2006, pero sin rivalidad ancestral entre ellos.
Boca y River se enfrentaron 373 veces entre partidos oficiales, amistosos, nacionales e internacionales, y sólo dos de ellas fueron en finales (en 1976 Boca ganó el torneo Nacional y en marzo de este año River se quedó con la Supercopa Argentina) pero ninguno fue tan determinante como serán los próximos dos.
La final Boca-River será un desafío para la seguridad. Justamente, la última serie internacional no terminó: hinchas de Boca lanzaron gas pimienta a los jugadores de River cuando éstos intentaban volver al campo de juego de la Bombonera.