Villa Gesell, el destino de sol y playa con mayor crecimiento en afluencia turística
A partir de diversos indicadores del sector turístico y aún en el marco de un contexto económico complejo en la Argentina, el cierre del mes de enero dejó un balance positivo para el partido de Villa Gesell: referentes de diversos rubros coincidieron en su primer análisis parcial de la temporada y ubicaron al destino en la posición más alta de la oferta vacacional dentro de la costa atlántica bonaerense.
Telégrafo dialogó con Jorge Cocco, Secretario de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Afines de Villa Gesell, con Víctor Borgia, presidente de la Unión de Comercios y la Industria geselina, y con Sergio Coronel, presidente del Colegio de Martilleros y Corredores públicos del partido. Los tres representantes de buena parte de la actividad comercial en el distrito -con variables en su parecer-, reconocieron que Villa Gesell se posicionó fuertemente como la mejor opción en territorio bonaerense en lo que va del verano 2019.
Con la salvedad de situar a Mar del Plata en un parámetro superior en lo que respecta a su histórico volumen de gente, desde la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Afines geselina no tienen dudas: “Indudablemente, el segundo destino de la costa atlántica es Villa Gesell, lo decimos con orgullo y lo afirmamos con certeza. El destino está muy instalado. Y no solo eso está marcado en el ingreso de vehículos y en el transporte de pasajeros, rubro por el cual llegan a ingresar aquí hasta 80 micros en un día. Las estadísticas no mienten”, explicó al respecto Jorge Cocco.
El encargado de la filial geselina de la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica Argentina detalló que “el mes de enero cerró con una ocupación general del 80%, en números que incluyen lo sucedido en Mar de las Pampas, Mar Azul, el casco urbano de la ciudad de Villa Gesell y la localidad de Las Gaviotas”.
Aunque respaldó el favoritismo geselino al momento de que los turistas elijan un destino en territorio bonaerense, Cocco no evitó separar los tantos: “En lo que respecta a hotelería, la temporada viene siendo buena aunque no me animaría a decir todavía que es superior. Haciendo números finos podríamos hablar de un crecimiento del 3%. Sin embargo, en el rubro de la gastronomía se ha hecho notar la crítica situación económica, por ejemplo, en que no haya habido rotación de cubiertos y sí más rotisería y pedidos a domicilio”.
En esa línea, Cocco agregó: “Lo mismo ha pasado con el servicio de sombras, según lo que hablé con algunos encargados del sector. El clima siempre es uno de los factores que incide en ese rubro y ahora, a través de los distintos servidores de Internet, la gente pudo levantar rápidamente algunas reservas que había llegado a realizar”, describió.
Según el dirigente de Fehgra, la realidad financiera de los argentinos impactó también en “distintos prestadores de servicios, como lo son el alquiler de cuatriciclos o las excursiones al Faro Querandí”.
“Estábamos a la espera de la gente que no viajó al exterior. Según nuestras estadísticas de los cuatro millones de personas que iban a salir del país, tras el proceso devaluatorio al menos dos millones se desparramaron por el interior. Aún no sabemos cuantos recibió la costa atlántica, pero en ese sentido no hay dudas de que Villa Gesell ha sido el destino destacado en la región”, concluyó.
Expectativas contra realidades
Por el lado de la UCI, su vocero Víctor Borgia dividió el análisis de lo acontecido en varias aristas a tener en cuenta. Por un lado se mostró en sintonía de reconocer que fue “mucha la gente que vino a Villa Gesell” y, en ese sentido, detalló: “Hay un cálculo que indica que creció en un 10% el arribo de turistas al partido”. Sin embargo, también resaltó: “Es un verano a priori en donde las expectativas eran más altas de lo que terminó siendo este primer mes del año”.
Para Borgia hay una parte del balance que es fundamental resaltar: “El faltante de disponibilidad de dinero. La gente vino con la plata justa. Le alcanzó para reservar el alojamiento en la condición que sea, y no tuvo para mucho gasto superior, ya sea desde la gastronomía, las heladerías, o el alquiler en la carpa. Todo eso estuvo por debajo de las expectativas”, insistió.
“Esto no tuvo que ver solo con Villa Gesell en sí, destinos como Pinamar y Cariló, hasta Mar del Plata, sufren esa misma situación”, agregó.
En diálogo con este medio el referente de la UCI geselina entendió que el proceso devaluatorio desarrollado el invierno pasado, generó “una escalada de interés en el turismo interno que tuvo lugar en los meses de agosto, septiembre y octubre, lo que hizo que la gente se asustara y comenzara a congelar sus estadías. Pero a partir de que el dólar demostró una quietud, ya en noviembre y diciembre, cuando quedó por debajo de los 40, otra vez aquellos que pudieron decidieron irse al exterior”, señaló.
Borgia también coincidió en la merma de la actividad del rubro gastronómico y la ocupación de playa. “Por supuesto que hubo excepciones”, aclaró al respecto. Y no dudó en afirmar que “la hotelería fue el sector más beneficiado este mes”. En relación al alojamiento hotelero, el empresario geselino precisó: “Mar de las Pampas, Mar Azul y Las Gaviotas tuvieron una ocupación promedio que no bajó del 90%”.
Con la lupa en la alta inflación “que distorsiona todos los precios”, Borgia fue consultado por la rentabilidad de los comercios afines al turismo. Y anticipó un porvenir complejo. “Nadie pudo llevar todo el ajuste en las tarifas a sus valores de venta. Actores como la energía, ya sea el gas y la luz, son muy importantes. Y después hay insumos para la hotelería que se fueron muy arriba. Diría que fue más rentable el verano pasado con menor ocupación que este verano con los hoteles llenos”, sentenció.
Buena temporada, escasa rentabilidad
La última voz en brindar sus apreciaciones sobre la actual temporada fue la de Sergio Coronel, presidente del Colegio de Martilleros de Villa Gesell. Sin vueltas, el dirigente expresó: “En términos particulares desde nuestro sector, podemos decir que la temporada ha sido buena, orientada a muy buena”.
De inmediato, Coronel agregó: “Esto no significa de que sea una temporada rentable, o comercialmente positiva. Sí es totalmente mejor a la anterior, ya que estamos estimando que nuestra actividad creció un 30% o 35% que el verano pasado. Aunque hay que tener en cuenta que el período estival del 2018 fue muy malo”, se sinceró.
Respecto a los alquileres de casas y departamentos, Coronel detalló: “Con la ventaja de tener anticipadamente algunas reservas ya definidas desde el mes de julio, hemos llegado a registrar en la ciudad de Villa Gesell porcentajes de ocupación de entre 70 y 80% y en ciudades como Mar de las Pampas, siempre por arriba del 90%”.
“Otros sitios de la costa atlántica bonaerense no han tenido estos índices, según lo que hablé con colegas de la región. Villa Gesell es un destino que tiene gran variedad de accesibilidad en alojamiento, muchas categorías y todas han trabajado bien, dentro del complejo panorama económico, es uno de los lugares en donde se han concretado mayor cantidad de alquileres”, cerró.
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