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Sin calefacción y con goteras: el recurrente martirio de los casineros de Pinamar

Con la llegada de un nuevo invierno, la preocupante situación que experimentan los trabajadores del casino Del Bosque de Pinamar se renueva. El frío, las goteras y la adicional falta de higiene vuelven un martirio su desempeño. La situación los has llevado, en numerosas oportunidades, a tener que cerrar el lugar antes de tiempo.

En diálogo con Telégrafo, uno de los trabajadores afectados, Federico Tomasone, contó que ya fueron varios los días de este 2019 que debieron terminar con la operatoria de manera anticipada. “Cerramos bastantes días este año, por cuestiones de infraestructura. Todos los inviernos sucede y este no ha sido la excepción”, explicó.

“El problema central ahora tiene que ver con la falta de calefacción pero en verano el problema es por el calor. Esta última temporada estuvo más llevadera, aparentemente han cargado los aires acondicionados. Sin embargo ha sido así porque es una época con más afluencia de público, entonces hay interés por parte del concesionario para que funcionen otras cosas existentes en el lugar, como por ejemplo el hotel y el bufet”, describió Tomasone.

 

El casino Del Bosque en Pinamar, con problemas continuos. (Fotos Ricardo Stinco)

 

Distinto es lo que sucede en el invierno. “La desinversión ha sido sistemática en este casino como en muchos otros de la provincia de Buenos Aires que están concesionados. Acá directamente el hotel del complejo en el que está el casino no pagó el gas” sentenció el trabajador.

“Este casino es provincial y como muchos funciona dentro de áreas que son privadas. Acá hay una concesión que está vencida y la promesa era que, para diciembre de este año, la empresa Boldt abra un nuevo casino en la zona de Intermédanos y Bunge. Sin embargo, pidió una prórroga hace unos meses y el edificio estará listo recién para noviembre del 2020. Es decir que mientras tanto será dificil que inviertan en este lugar” graficó Tomasone.

“Ante una situación así de falta de mantenimiento estructural, en una instancia de frío todo se potencia. Y para el público también es negativo, más allá de que nosotros no tengamos las condiciones laborales que corresponde” sumó el vocero de los empleados pinamarenses.

Durante el 2018, una de las alternativas adoptadas por los trabajadores fue modificar el horario de trabajo en época de bajas temperaturas. “El año pasado nos cambiaron el horario y abrimos de 18 a 00.  Pero de todos modos se hace insostenible cuando llegan las 12 de la noche”, comprendió.

 

Un casino que tiene su futuro en otro lado y un presente muy precario.

Lo que viene

Con un fin de semana largo por delante, los trabajadores piden simplemente que por lo menos arreglan lo que existe como parte de la estructura de calefacción, que cuenta con artefactos muy viejos y deficientes. “Es la de mínima, no estamos con pretensiones y siempre hemos demostrado buena voluntad. Tenemos techos que se llueven en la sala de descanso, falta de higiene, falta de limpieza y el hotel ahora está cerrado”, describió Federico.

Este jueves 4 de julio será el momento en que los trabajadores vuelvan a la sala para afrontar lo que será el receso de cuatro días con el lunes 8 puente y el feriado patrio del martes 9. “Queremos trabajar y nos prometieron que iban a pagar, veremos con qué nos encontramos”, advirtió.

Sin respuestas del concesionario, por el momento sin soluciones por parte de Lotería de la Provincia y, según las averiguaciones realizadas por el gremio, con el hotel con sus cuentas embargadas, Federico concluye con contundencia: “Es todo parte de un sistema que está descompuesto.

 

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