El Congreso de Colombia concretó esta semana un primer paso para, de momento, comenzar a analizar la aplicación de un modelo de producción de marihuana con fines recreativos.
El proyecto presentado por un grupo de senadores de distintos partidos políticos contempla modalidades como el “autocultivo” sin ánimo de lucro, permitido sin licencia en propiedad privada con menos de 20 plantas.
Suscribieron el proyecto de ley representantes de la Alianza Verde, del Partido Liberal, de la U, de Cambio Radical y de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, la formación heredera de las FARC.
“Por medio de una licencia otorgada por el Estado, habrá establecimientos autorizados para sembrar, cultivar, cosechar, almacenar y transformar y comercializar cannabis para uso adulto”, señala uno de los articulados de la ley.
De acuerdo a los considerandos de la iniciativa, esos establecimientos podrán ser públicos o privados. En el primer caso, tendrían la “obligación de ofrecer precios accesibles para consumidores de distintos niveles socioeconómicos, con el fin de desincentivar la recurrencia al mercado ilegal”.
El Estado, que podría encargarse directamente de la venta a través de páginas webs, debería fijar un impuesto.
Impulsores conscientes
En su última alocución ante la asamblea general de Naciones Unidas, el expresidente Juan Manuel Santos había reconocido que la estrategia mundial de lucha contra las drogas ha fracasado y que había llegado el momento de plantear un cambio de enfoque.
Aunquelas principales fuerzas de la derecha colombiana, especialmente el Centro Democrático y el Partido Conservador, se opondrán al proyecto y probablemente logren frenar la iniciativa, Sus impulsores no renunciarán a poner el tema sobre la mesa legislativa.
Colombia, que ya cuenta con una creciente industria de cannabis medicinal, es el mayor productor de hoja de coca del mundo, con 169.000 hectáreas cultivadas en 2018. Esa economía ilegal da sustento a las bandas organizadas y guerrillas residuales que se disputan el control de varias zonas rurales.