En la localidad de Cariló, partido de Pinamar, la Fundación Cariló, la Cámara de Turismo de Cariló y el Cariló Golf concretarán este sábado un gran anhelo con la apertura del llamado Jardín de Colibríes, una iniciativa que busca atraer a ese tipo de ave a la región.

El proyecto por el que las entidades han comenzado a trabajar hace mucho tiempo está ubicado en un terreno de 900 metros cuadrados dentro del predio de Cariló Golf, bajo el marco jurídico de paisaje protegido que posee la localidad.

 

 

Aunque en Argentina ya existe otro jardín con el fin de atraer colibríes, el proyecto en Cariló es el primero bajo un paisaje protegido, totalmente al aire libre. La intención de sus creadores es además convertir al lugar en un jardín modelo para toda la localidad como sitio de aprendizaje, avistaje de aves, relajación y conciencia ambiental.

A través de este novedoso espacio las entidades buscan concientizar sobre la fauna del bosque y desarrollar una plantación de flores aptas para las diferentes estaciones climáticas que cumplan con la necesidad de alimentación que posee el colibrí.

El terreno se hallará abierto, sin ningún tipo de jaula ni criadores de aves e incluirá algunas reglamentaciones que deberán cumplir sus visitantes para evitar entorpecer la actividad deportiva del golf, como así también prevalecer siempre la seguridad de las personas y la tranquilidad y paz del bosque.

 

 

Características del colibrí

El colibrí o picaflor, del orden de aves “apodiformes” (nombre que significa sin patas) es un grupo de distribución mundial pero con su máxima biodiversidad en los trópicos húmedos.

Este nombre es debido a que algunas de las especies pasan casi toda la vida volando y solo tocan tierra para anidar. El orden está caracterizado por especies que vuelan muy bien y comprende dos grandes grupos morfológicos.

▪ El primero está muy adaptado al vuelo, generalmente tienen un cuerpo esbelto, con las alas de gran tamaño y suelen alimentarse de insectos voladores.

▪ El segundo, formado por los colibríes, está adaptado a libar el néctar de las flores, para lo cual necesitan quedarse inmóviles en el aire.

Algunas especies han llegado por convergencia a parecerse mucho a las golondrinas, sin embargo estas se ubican en el orden “passeriformes”. El ave más pequeña que existe, de apenas 5 centímetros desde la punta del pico hasta la cola, se ubica en ese orden.

▪ Se alimenta del néctar de las flores.
▪ Es un importante polinizador.
▪ Come cada 10 minutos, esto significa que consumen en alimento cerca de 2/3 de su peso corporal cada día.
▪ Come hasta entrada la tarde y duermen hasta el amanecer.

 

 

▪ Por las noches o ante la escasez de comida es capaz de entrar en una especie de hibernación reduciendo su metabolismo, ritmo cardíaco y respiratorio.
▪ Sobrevive principalmente del azúcar que obtiene del néctar de las flores. Si bien este alimento es energético pero resulta pobre en proteínas, vitaminas y minerales, el ave complementa su dieta cazando pequeños insectos.
▪ Cuando extrae el néctar, el colibrí se retira, pero a los pocos minutos regresa para alimentarse otra vez. De esta manera lleva el polen de una flor a otra. Es un cruce efectivo que coloca el componente masculino en el femenino de dos flores diferentes, lo que puede dar lugar a la reproducción y el crecimiento de nuevas plantas.
▪ Arma pequeños sitios donde puede posarse para descansar, como árboles o colgadores de plantas.
▪ El macho es territorial y resguarda tanto su espacio como su fuente de alimento.
▪ Hay que eliminar el uso de plaguicidas, que mata a los polinizadores.
▪ Hay que evitar el uso de agua azucarada sin control diario, atento que es un núcleo de alta concentración de bacterias que el colibrí puede transportar e incluso matarlo.

Las flores favoritas del colibrí

▪ Coloridas, particularmente rojas, anaranjadas, amarillas, blancas, azules o moradas.
▪ Preferentemente las que tienen una corola tubular tienen mayor cantidad de néctar, por lo tanto son las más atractivas.
▪ Entre las flores favoritas del colibrí, se destacan (denominación científica y nombre común):
Abelia grandiflora, Abelia
Aboutilon, Abutilon
Aljaba, Aljaba
Duranta erecta, Duranta
Hibiscus, Hibiscus siriacus
Lantana, Lantana
Lavanda dentata, Lavanda
Leonotis, Leonitis
Campsis radicans (trepadora), Bignonia

 

 

Agapanthus, Agapanto azul
Aloe arborescens, Aloe
Asclepia curassavica, Bandera española
Canna Indica, Achira
Hedychium, Hedychium
Kniphophia, Tritoma
Plectrantus eclonii, Plectrantus
Plectrantus verii, Dólar negro
Rusellia equisetiformis, Lluvia de coral
Strelizia Reginae, Flor de pájaro
Salvias, Salvias

 

 

¿En peligro de extinción?

Aunque no es muy común en la provincia de Buenos Aires, el colibrí es un residente en la zona de Parque Cariló y no está en peligro de extinción.

Sin embargo, su presencia ha disminuido atento que en las plantaciones del lugar predomina el color verde. Esto llevó a que el pájaro emigre en búsqueda de flores que puedan proveerle el néctar necesario para su subsistencia.

Por ello, el jardín contará con información sobre el ave, como así también de la flora que estará plantada, con el objetivo que los visitantes, más allá de disfrutar del vuelo del colibrí y de un paisaje único, puedan contar con herramientas suficientes para replicar el jardín natural en sus hogares.

Al colibrí se lo observa siempre en búsqueda de flores para alimentarse. Emite un zumbido constante y característico. Su nido es una pequeña taza formada por fibras vegetales ubicada en lugares ocultos como por ejemplo enredaderas. Gracias a las flores, el ave se siente atraída.

 

 

Cariló, paisaje protegido

La ley de la provincia de Buenos Aires n° 12.099 de 1998, declara de interés provincial el paisaje protegido y el desarrollo ecoturístico de la localidad Parque Cariló. Bajo este marco normativo amplio, el municipio de Pinamar, a través de la ordenanza n° 3361 del 2006, reglamenta de acuerdo con las actividades y las características del lugar, teniendo por objeto conservar y preservar la integridad del paisaje fitogeográfico, geomorfológico y urbanístico.

La declaración de paisaje protegido es absolutamente original, presenta rasgos distintivos y constituye una clasificación diferente. Deviene a consecuencia que no era viable categorizar a Parque Cariló como reserva natural, y tampoco como bosque protector, atento que llevaría a una interpretación forzada de las normas. Por todo ello, Parque Cariló cuenta así con una herramienta para conservar, preservar y garantizar el ambiente propio de esta localidad y regular la afluencia turística.” (Fundamentos ley provincial n° 12.099/98).