Una nueva muerte de una mujer en manos de un violador –dejado en libertad a principios de 2016 en contra de todas las recomendaciones- vuelve a encontrar a las organizaciones en la calle para pedir justicia y repudiar al juez que liberó a Sebastián Wagner.

El sospechoso del asesinato de Micaela García –quien habría confesado el crimen y dado indicaciones para el hallazgo del cuerpo- se encontraba en libertad condicional tras haber cumplido parte de su condena por dos violaciones. El servicio penitenciario de Entre Ríos había emitido un informe negativo y desaconsejado su liberación, pero el magistrado Carlos Rossi otorgó el beneficio.

La joven de 21 años había desaparecido hacía una semana a la salida de un boliche en la ciudad entrerriana de Gualeguay. Su cuerpo ultrajado y sin vida fue encontrado este sábado entre pastizales a la vera de la ruta nacional 12. Wagner fue detenido en la casa de su madre, como también su padrastro, José Fabián Ehcosor, policía municipal del partido bonaerense de Malvinas Argentinas y suboficial retirado del Ejército, a quien se acusa de haber encubierto al sospechoso al igual que Favio Pavón, dueño del lavadero donde trabajaba Wagner.

Las secciones de todo el país del movimiento NiUnaMenos y demás organizaciones sociales llamaron a movilizar y concentrarse en las plazas este mismo sábado a las 20, mientras que en muchas ciudades se organizan marchas para el transcurso de la semana próxima.

El grito es uno solo y hermana al territorio nacional, donde cada 30 horas una mujer es asesinada, tras un nuevo femicidio que podría haberse evitado: basta de violencia machista.