Luego de que las autoridades del gobierno bonaerense decidieran suspender nuevamente la aplicación de la ley que regula el uso de los agroquímicos, desde el Centro de Investigaciones del Medioambiente recalcaron que la norma aprobada años atrás debería ser directamente derogada.
“El gobierno debe escuchar a la gente. Lo que se pide es la derogación y no la suspensión”, expresó al respecto Damián Marino, integrante del centro de especialistas.
En declaraciones al programa Siete Colores de radio 97 Une, Marino reconoció que le “sorprende que se extienda algo que debería haberse derogado” y puso el foco en la ley aprobada durante la administración de la exgobernadora María Eugenia Vidal: ”Está llena de puntos de conflictos y de problemas”, aseguró el investigador en ese sentido.
Acto seguido Marino convocó a ”discutir de verdad el tema, porque sino parece que se avanza pero nada sucede”, y en esa línea le pidió a las autoridades del Ministerio de Salud bonaerense que “empujen” un estudio “para saber cuál es el estado de salud de las poblaciones y cómo han cambiado los perfiles de patologías más frecuentes y las causas de muerte”.
Agrotóxicos: a través del ministro @JavoRodriguezL el gobierno bonaerense admite la necesidad de una nueva ley. https://t.co/UXoHf04yoC pic.twitter.com/h3GIXy6A6f
— Telégrafo (@telegraficos) May 23, 2021
Marino agregó que “si bien se habla mucho del glifosato en el Senasa hay una decena de plaguicidas registrados” y explicó que “el glifosato es la molécula básica de los plaguicidas pero no se usa solo. Se usa con tres o cuatro activos más por la resistencia que presenta, año a año, el medioambiente. Es decir que el cóctel químico cada vez es más grande”.
Licencado en química en orientación química orgánica y doctorada en ciencias exactas, Marino puntualizó que “el tema ambiental debe ser una política de Estado” y reflexionó: “Cuando uno se pregunta por qué estos temas no avanzan uno debe tener en cuenta las tensiones que hay en el campo de lo político con el área productiva”.
El investigador del Conicet enfatizó que “el gobierno deberá ver a quién atiende” y sentenció: “Hay que tomar dimensión del problema y tomar la decisión de defender la salud pública”.
Marino sostuvo que “hay muchos excluidos por este sistema de producción” y entendió: “Esa es gente que ve afectada su salud y su buen vivir y no está contemplada al analizar el paquete de este sistema productivo que si sopesa cuánto se produce y cuántas retenciones deja. Yo creo que si se evaluara también el impacto ambiental y de salud, este sistema productivo se convertiría en no rentable”, concluyó.