Un dinosaurio en Villa Gesell: cómo funciona, de dónde es y quién está adentro

Sin dudas, una de las mayores atracciones turísticas que ha llegado a Villa Gesell en el último tiempo -como en el fin de semana largo de Pascuas- es el dinosaurio que pasea por el bosque fundacional. Fabricado en China por los mismos que hicieron al Blue original de las películas de Jurassic World de Disney, viajó desde Brasil para divertir a todo el que se lo cruce. Tiene la apariencia perfecta de un velociraptor y un sonido idéntico.

Algunos miran de lejos, otros corren y gritan. Los más chicos se vuelven locos por sacarse una foto o filmar un video. Es que el dinosaurio llama la atención de turistas y geselinos que se preguntan todo sobre él. Cómo funciona, de dónde es y quién está adentro de ese traje.


“Se trata de una ropa mecanotrónica, inspirada en el velociraptor del filme”, contó a Telégrafo Marcelo Ceppo, quien junto a su pareja Ana Paula y su hijo Maicon trajeron a este dinosaurio desde Brasil exclusivamente a Villa Gesell, tras viajar por distintas partes de Latinoamérica llevando su diversión.

 

Dinosaurio Villa Gesell

Marcelo Ceppo, el padre de la criatura. (Fotos Ricardo Stinco)

 

¿Cómo funciona el dinosaurio?

Conducir el traje no es sencillo. Una persona debe ingresar y darle vida al dinosaurio a través de comandos que tiene en su interior para mover la cabeza, los ojos y hace ruido. “Claro que la persona que está adentro tiene que conocer un poco cómo era el dinosaurio en aquel momento”, explica el hombre.

Porque, por ejemplo, los velocirraptores casi no tenían manos, sus brazos eran muy cortos entonces tenía que usar su boca para atrapar las presas. “Los chicos muchas veces quieren agarrarle la mano y el dino no tiene cómo extenderla, es muy corta”, dice.

 

 

El traje pesa 80 kilos. “Es como si te colgaras a una persona en la espalda y salieras caminando, pero con un poquito más de confort”, sostiene. Mientras, espera junto a su pareja y su hijo a que se termine de cargar la batería del traje.

Por dentro tiene unos arneses para engancharse, es por eso que un cartel que cuelga de la jaula donde trasladan al dinosaurio pide en portugués que nadie se agarre de la cola ni de la cabeza. La persona que está adentro puede perder el equilibrio y lastimarse la espalda. 

No apto para claustrofóbicos

“Vemos para afuera solo a través del visor de una cámara, no tenemos comunicación visual”, dice Marcelo, quien se turna con Ana Paula para conducir al dinosaurio.

Algo muy parecido ocurría con el velociraptor real, “veía muy poco, corría muy rápido y sentía el olor de sus presas para poder comerlo”.

 

 

Hacia el interior del traje no ingresa aire, por eso hay un ventilador. Es importante, aclara la familia, que siempre haya uno de ellos auxiliando por fuera, guiando el movimiento. Recuerdan que les pasó quedarse sin batería. “Es como si estuvieras en un pozo negro sin nada de luz, inmovilizado, y ahí la persona que está afuera tiene que guiarte porque no podés salir”. Definitivamente no apto para claustrofóbicos. 

El origen del dinosaurio

Con el objetivo único de divertir, el dinosaurio nació para ser la mascota de Ceppo Life Support, una empresa que fabrica cascos para bomberos en Río Grande Do Sul, Brasil. Sin embargo rápidamente su fama alcanzó todo el país y ahora viaja en busca de nuevos espectadores que asombrar.

El dino es importado de China, lo construyó el mismo fabricante del Blue original para Disney en Jurassic World. “Tiene algunos comandos distintos porque allá fueron pocos minutos que la utilizaron, este es un poco más completo”, dice Marcelo. Claro, el ejemplar latinoamericano no tiene descanso.

 

Los chicos corren al dinosaurio por todo el bosque de Villa Gesell y se divierten. (Fotos Ricardo Stinco)

 

“Se transformó en un servicio más de la empresa”, cuenta Marcelo Ceppo quien nació en Argentina pero hace más de treinta años que vive en Brasil. Prácticamente ya tienen la agenda de todo el año completa con eventos. “Hemos ido a cumpleaños, exposiciones, fiestas y hasta estuvimos con el hijo del presidente de Uruguay”, recuerda.

Esta semana, los Ceppo viajaron durante tres días 2500 kilómetros exclusivamente para las celebraciones de Pascua en el bosque fundacional de Villa Gesell.

Los viajes son muy divertidos para la familia, incluso en la ruta. Dicen que la gente les toca bocina cada vez que descubren al dinosaurio. “Cuando parás en una estación de servicio no podés salir hasta que todo el mundo se saca una foto”, cuentan.

En la Fiesta de la Diversidad también

El dinosaurio vuelve a Villa Gesell durante el fin de semana de largo y estará presente en diversos escenarios hasta el domingo.

Viernes
16:00 horas: Centro de Mar Azul
17:30 horas: Centro de Mar de las Pampas

Sábado
15:00 horas: Presente en el Desfile de Carrozas, avenida 3 entre Paseos 110 y 104

Domingo
A partir de las 11:00 horas: Recorriendo los puestos de la Fiesta de la Diversidad, en el centro geselino.


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