Un grupo de investigación de mamíferos del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras (IIMyC, CONICET-UNMDP) y de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP) publicó recientemente en la revista internacional Marine Pollution Bulletin, un estudio en el que se reporta la presencia de microplásticos en el tracto digestivo de los delfines de la especia franciscana Pontoporia blainvillei.
La especie, en peligro de extinción, habita exclusivamente las aguas costeras del océano Atlántico sudoccidental, al sur de Brasil, Uruguay y norte de Argentina.
Primer estudio sobre microplásticos en delfines en Argentina
Este trabajo fue realizado en el marco de la tesis doctoral en la Universidad Nacional de Mar del Plata de la becaria doctoral del CONICET Antonella Padula.
Se trata del primer estudio publicado sobre microplásticos en la especie y en delfines de Argentina y el segundo en cetáceos sudamericanos.
Si bien el trabajo fue liderado por investigadores del citado grupo participaron también especialistas del grupo de aves marinas del IIMyC, del Instituto Argentino de Oceanografía (IADO, CONICET-UNS), de la Asociación Naturalista Geselina, en colaboración con colegas del centro de química inorgánica (CEQUINOR, UNLP-CONICET) y del denominado Grupo de Estudos de Mamíferos Aquáticos do Rio Grande do Sul (GEMARS).
Estudian la presencia de microplásticos en el Mar Argentino y la Antártida
La investigación sobre 10 delfines hembras
La investigación consistió en el análisis de muestras de tejido intestinal de diez delfines hembras encontradas entre los años 2013 y 2023 en la costa bonaerense.
Los análisis tuvieron como objetivo analizar la presencia, características y la posible absorción de microplásticos en el sistema digestivo de la especie.
En consecuencia se examinaron diferentes tipos de microplásticos, tamaños, composiciones y la potencial interacción de estos con los sistemas biológicos del delfín franciscana, una especie clave dentro del ecosistema costero bonaerense.
Se halló microplásticos en todos los delfines examinados
Según detalla el artículo publicado, los especialistas reportan la presencia de microplásticos en los intestinos de todos los ejemplares analizados.
“Entre los más comunes había fibras de poliéster, algodón semisintético y polipropileno, materiales ampliamente utilizados en productos textiles. Además, se detectaron pigmentos artificiales como el azul índigo y el amarillo azo, presentes en materiales plásticos. Este resultado subraya la omnipresencia de la contaminación plástica en los océanos y su impacto directo en la fauna marina”, indicó Padula al respecto.
La especialista explica que algunos de los microplásticos podrían quedar absorbidos a través de las paredes intestinales de los delfines y entonces tener graves implicancias para su salud, afectando potencialmente su metabolismo, inmunidad y fertilidad, así como otros aspectos de su fisiología.
Sobre la exposición del delfín franciscana a los plásticos
El delfín franciscana es una especie clave en este contexto, ya que su posición en la cima de la trama trófica la convierte en un bioindicador ideal para evaluar el impacto de la contaminación en los ecosistemas marinos, sostiene Pablo Denuncio, investigador del equipo.
“Además, este estudio es especialmente importante porque aporta datos científicos para mamíferos marinos en una región geográfica históricamente poco estudiada en términos de contaminación por plásticos, lo que contribuye a llenar un vacío en la investigación ambiental en América del Sur”, añade Padula.
La franciscana se encuentra catalogada como una especie en peligro de extinción, reconocida a nivel regional y nacional como ‘vulnerable’, lo que sugiere que se halla en grave riesgo de desaparecer en las próximas generaciones.
En consecuencia, años atrás, la especie quedó considerada monumento natural de la provincia de Buenos Aires a través de la ley 14.992 y quedó dentro del máximo nivel de protección a nivel provincial.
“Estos descubrimientos subrayan la urgente necesidad de implementar políticas públicas que impulsen la disminución del uso de plásticos desechables y promuevan la limpieza de los océanos. Solo a través de un esfuerzo global coordinado, que incluya la reducción de la producción y el consumo de plásticos, así como la implementación de medidas de protección marina, se podrá asegurar la conservación de especies marinas y la salud de los océanos, que son esenciales para mantener la biodiversidad global”, concluye Ana Ronda, investigadora del IADO.