Un grupo internacional de científicos trató con una sustancia de origen natural, combinada con el tratamiento estándar de quimioterapia, a un grupo de pacientes con cáncer de pulmón que mostraron una supervivencia cuatro veces superior a la media. Se trata de la silibina, un compuesto presente en las semillas del cardo mariano.
Según un informe publicado por el diario El País de España, el equipo dirigido por el veterinario Manuel Valiente, ha suministrado pastillas con este extracto de cardo a 18 pacientes desahuciados, con carcinoma de pulmón y metástasis cerebrales.
La supervivencia media de estos enfermos, 15 meses y medio, cuadruplicó la de los pacientes que no tomaron estas píldoras, y en tres casos las metástasis cerebrales desaparecieron hasta ser indetectables.
Los resultados, aunque todavía muy preliminares y por confirmar, son optimistas. De acuerdo a la publicación de El País, el descubrimiento surgió en 2014 cuando el médico Joaquim Bosch le indicó Legasil, un complemento alimenticio a base de cardo mariano, comercializado como protector hepático, a una paciente con cáncer de mama y metástasis en hueso e hígado con un pronóstico de vida de un mes.
Los autores de la investigación buscan ahora financiación, unos 700.000 euros, para llevar a cabo un ensayo clínico más amplio, con medio centenar de pacientes. Las farmacéuticas a las que han llamado a la puerta han rechazado participar. El tratamiento con Legasil que han empleado esta vez cuesta unos 100 euros al mes, frente a los miles habituales que se gastan en los fármacos oncológicos.