En plena pandemia de coronavirus, la compañía de Cupertino presentó esta semana el llamado iPhone SE de 2020, sin ningún evento previamente anunciado.
Se trata de un terminal compacto, con una pantalla de 4,7 pulgadas, que puede reservarse en tres colores —negro, blanco y rojo— y en Europa tendrá un costo de 489 euros.
El smartphone cuenta con el procesador Apple A13 Bionic, que también incluyen teléfonos como el iPhone 11 y iPhone 11 Pro (ambos doblan en precio al nuevo SE —el iPhone 11 se puede comprar desde 809 euros y el Pro desde 1.159 euros—) y es el más potente existente en el mercado.
La versión más barata del nuevo iPhone SE cuesta 489 euros y tiene 64 GB de almacenamiento. La de 128 GB se puede comprar por 539 euros y la de 256, por 659 euros.
Frente a las múltiples cámaras traseras que tienen los iPhones más recientes, el iPhone SE solo tiene una. Es un sensor de 12 megapíxeles con una apertura de ƒ/1,8.
Además, cuenta con un zoom digital de hasta cinco aumentos y un modo retrato con seis efectos. El sensor se caracteriza por la tecnología HDR, que reconoce a los sujetos que aparecen en el encuadre y reajusta la luz para dar más naturalidad y pulir los detalles de las luces y las sombras. La cámara permitirá grabar vídeo en resolución 4K y 60 fps. Mientras tanto, la cámara frontal tiene siete megapíxeles y una apertura de f/2.2.
El nuevo smartphone cuenta con grandes marcos. Carece de Face ID para desbloquear el terminal con la cara. Pero se recupera el sensor Touch ID, que permite acceder al mismo con la huella dactilar. Este botón también permite iniciar sesión en apps, realizar transacciones con Apple Pay o autorizar compras de la App Store.
El terminal, que es resistente al agua hasta un metro de profundidad durante 30 minutos, cuenta con soporte de carga inalámbrica y con carga rápida. Según la compañía, se conseguirá un 50% de batería en unos 30 minutos.
El dispositivo tiene además conectividad WiFi6 —el último estándar para conexiones inalámbricas que permite conexiones más rápidas, un mayor alcance y una mayor densidad de dispositivos conectados—.