Con la presencia de Dolly Irigoyen por segunda noche consecutiva en MasterChef, Juan Francisco Moro se quedó por poco afuera del balcón. Como la semana pasada, este jueves tendrá la última chance de evitar la gala de eliminación del domingo.
El guardavidas de San Bernardo estuvo otra vez entre los platos mejor logrados, pero la competencia avanza y hay cada vez menos lugar en el balcón. Sin embargo, el costero ha mejorado notoriamente con el correr de las emisiones. Incluso fue el ganador de la mini prueba de la noche y se llevó un beneficio.
En esta oportunidad, compitieron Juan Francisco, Candelaria, Antonio, Rodrigo y Daniela. El desafío del martes tuvo dos partes y ambas relacionadas con las tareas que realiza un jefe de cocina. En principio, los participantes tuvieron que preparar una ‘croque madame’ en 15 minutos.
Dolly explicó en qué consistía: un sándwich con jamón, queso y salsa bechamel gratinada en el horno con un huevo frito al final. Con todos los ingredientes en la canasta, los concursantes pusieron manos a la obra.
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En el escaso tiempo que tuvieron, los chef -Donato di Santis y Damián Betular junto a Dolly- dieron algunas indicaciones y consejos.
Al momento de degustar, Dolly mencionó que Juan Francisco fue el primero que llevó su sándwich al horno. Finalmente se inclinaron por la ‘croque madame’ del guardavidas por se el que “despegó” entre las preparaciones.
Plato principal
Los participantes tuvieron un minuto para ir al mercado, elegir una proteína, marcarla con su nombre y ver qué otros ingredientes había disponibles, aunque no pudieron llevarse nada. Después, la conductora de MasterChef, Wanda Nara, repartió menúes en blanco. Allí les pidieron anotar e idear un plato de restaurante con la proteína elegida y lo que vieron en el mercado.
Juan Francisco pensó en un calamar relleno con ricota y jamón crudo en salsa pomodoro, con papas al romero. Terminado el tiempo, Betular anunció la complejidad: cada jugador recibiría un menú diferente al elaborado.
Rodrigo con su medalla plateada pudo elegir y se inclinó por el menú de Daniela. A Juan Francisco, en tanto, le tocó realizar la idea de Candelaria, un vacío braseado con papas estofadas.. Su beneficio sin embargo no fue una ventaja para él ya que consistió en quitarle minutos de preparación a algunos de sus compañeros.
Transcurridos los 50 minutos, llegó el momento de la degustación y devolución del jurado.
Buena devolución
Juan Francisco presentó así su vacío a la cacerola con puré asado de coliflor, verduras estofadas y salsa agridulce. Lo primero que valoró el jurado fue el punto de la carne, sobre todo por el tiempo que tuvo para cocinar.
Dolly aseguró que estaba sabroso y picante, aunque cuestionó que el plato no estaba “integrado”.
Para definir, el jurado llamó primero a Rodrigo para darle el delantal gris. Luego Daniela, a partir de la idea de Juan Francisco, se ganó un lugar en el balcón.
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Finalmente quedaron Antonio, Juan Francisco y Candelaria, con un solo lugar vacante. El jurado optó por el plato de Candelaria.
Así, Juan Francisco se quedó con el delantal gris de MasterChef y este jueves deberá competir por una última chance de esquivar la gala de eliminación. ¿Podrá repetir la proeza de la semana pasada?