El conflicto iniciado en Gaza en octubre pasado tras el ataque de la milicia palestina de Hamás a Israel se multiplica en la región oeste de Asia luego de que el ejército hebreo concretara una incursión en la ciudad de Damasco, la capital de Siria, y asesinara a integrantes de las fuerzas armadas de Irán.
El ataque de Israel en Siria tiene lugar después de sucedida la destrucción de un centro de espionaje israelí en la región iraquí de Kurdistán.
Se trata de la intervención militar más mortífera ordenada por el primer ministro israelí Benjamín Netanyahua en Siria desde el inicio de la contienda.
En paralelo, el impacto de misiles en una base de Estados Unidos en Irak causó varios heridos, leves y graves.
עד לניצחון המוחלט. pic.twitter.com/QkR0QjuurA
— Benjamin Netanyahu – בנימין נתניהו (@netanyahu) January 19, 2024
En consecuencia el conflicto inicial se reproduce ahora en varios frentes después de haber causado más de 10.000 muertos en un mes y cerca de 25.000 en total en poco más de 100 días.
Por el lado de lo que acontece en la franja de Gaza, el manifiesto sufrimiento de miles de personas vuelve a ampliar las voces norteamericanas, europeas y de otros países de África y Asia para que Israel pare la ofensiva, algo a lo que Netanyahu se ha negado sistemáticamente.
Netanyahu sobre el conflicto de Israel en Gaza: “La guerra no debe detenerse”
Más allá de Siria, en la franja de Gaza los soldados de Israel siguen con su ofensiva en el marco del conflicto con Hamás, centrada en la ciudad de Jan Yunis, en el sur, y en algunos puntos del norte, pese a que hace semanas Israel dio por despejada esta zona.
La negociación de una solución para involucrar a Palestina en esa región siempre se halla vigente, pero muchos aseguran que hay contradicciones en el gobierno de Netanyahu sobre la idea de instaurar un Estado palestino tras el final de la guerra.