Días después de coronarse subcampeón en el reality gastronómico de Telefe, el cocinero geselino Patrick Lechner habló con Telégrafo sobre su resonante participación en el certamen y sus perspectivas para lo que viene.
“Sinceramente, la repercusión ha sido mayor de la que pensé”. Sin vueltas, tal cual se mostró frente a la pantalla desde aquel debut de mayo pasado, Patrick dialogó con este medio en medio de los preparativos de un inminente viaje de vacaciones.
“Ser parte de este programa ha sido una gran manera de vivir otro invierno de modo distinto. Ahora se viene un descanso para retomar con todo la apertura de Castillo de Ilusiones”, cuenta el joven cocinero respecto a su restaurante en Villa Gesell, ubicado en 103 bis y la playa. “Para el fin de semana largo de agosto esperamos poder reabrir y a partir de esa fecha, como siempre, trabajaremos de corrido durante 110 días hasta el 1 de mayo, fecha en la que cerramos por los meses de temporada baja”, aclara.
Lejos de toda hipocresía, consultado por los beneficios que su paso por la TV podría generar en su emprendimiento, Patrick razonó: “No tengo dudas de que mi participación ayudará al local, pero afortunadamente, de por sí, siempre laburamos bien”, detalló sobre sus 12 años de servicio en el lugar.
Patrick Lechner, en su Villa Gesell natal tras disputar la fina de Dueños de la Cocina. (Fotos Ricardo Stinco)
Al momento de hablar de sus sensaciones tras la final perdida, Lechner admitió vivir momentos que a más de un televidente le resultarían conocidos: “Los primeros tres días me los pasé en silencio, de mal humor. Me gusta salir victorioso en todo. Pero el balance de haber llegado a la instancia definitiva es positivo. De hecho, ganar Dueños de la Cocina no sé si hubiera sido lo mejor que me podía pasar”, sentenció.
“Sucede que toda esa película de tener un restaurante en Capital Federal durante un año a mí no me rendiría. No me interesa hacerme millonario, yo estoy bien acá en Villa Gesell, con mi casita, mi familia y mi restaurante, no soy tan ambicioso”, aclaró enseguida.
Para el final, en párrafo aparte, quedaron sus consideraciones sobre el jurado compuesto por Christophe Krywonis, Donato De Santis y Narda Lepes y la determinación del cierre: “Me pareció bien que gane Camila, por la habilidad en la cocina ella se lo merecía, yo me caracterice sobre los demás simplemente por remarla, tal mi costumbre”, concluyó con auténtica modestia.
