Las Toninas: el comerciante asesinado murió a causa de un golpe en la cabeza
Días después de la detención en Las Toninas de Blas Sosa, imputado por el homicidio de su amigo, jefe y compañero de dúo musical, Aarón González Rodríguez, se conocieron los resultados de la autopsia realizada sobre el cuerpo del comerciante asesinado. De acuerdo al informe forense, un golpe en la cabeza resultó el desencadenante de su muerte.
El crimen conmocionó a Las Toninas por los detalles escabrosos que lo atraviesan y el desenlace fatal de González Rodríguez, hallado enterrado en el fondo de su vivienda.
Macabro homicidio en La Costa: hallan a comerciante enterrado y hay un detenido
Un homicidio pensado para apropiarse de los bienes del comerciante de Las Toninas
Con 46 años, el empresario gastronómico costero tenía una fábrica de pastas denominada “El Raviolito”, situada a pocos metros de su inmueble de residencia.
De acuerdo a las precisiones brindadas por la autopsia, se determinó que González Rodríguez murió de manera instantánea a causa de un fuerte golpe en la cabeza que le provocó la fractura del hueso temporal derecho con hundimiento de cráneo.

La fábrica de pastas “El Raviolito” de Las Toninas, era propiedad de Aaron González Rodríguez.
Además, los peritos estimaron que la data de muerte ronda los 20 días antes del hallazgo de su cuerpo.
El comerciante fue hallado el miércoles pasado en horas de la noche a un metro y medio de profundidad en el terreno trasero de su vivienda, tras ser detectado por un perro especialista en ese tipo de búsqueda.
Después de eso, dentro de la casa de la víctima, la policía científica detectó posibles manchas de sangre en el baño y debajo de una escalera.
La hipótesis de los investigadores apunta a que Sosa concretó el homicidio para apropiarse de los bienes del empresario.
En consecuencia se comprobó que Sosa había vendido un automóvil Volkswagen Vento propiedad de la víctima y fingió ser González Rodríguez a través de un teléfono celular, enviando mensajes y fotos falsas de supuestos viajes a Brasil.
El acusado permanece detenido a disposición del fiscal Martín Prieto, mientras se analiza el rol de su pareja, sospechada de participar en la venta del vehículo y posible encubridora del crimen.
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