Ante el calor: guía de buenas prácticas para cuidar el consumo eléctrico

Ante el aumento de las temperaturas y la consecuente necesidad de refrigeración, el ENRE elaboró una guía de buenas prácticas para cuidar el consumo eléctrico. En esta época se intensifica el uso de aires acondicionado y heladeras.  

Así, el organismo nacional instó a dosificar el consumo de kilovatios-hora de éstos y otros aparatos. Se busca de esta forma contribuir a reducir los picos masivos de demanda energética y el riesgo de sorpresas desagradables a la hora de pagar el servicio eléctrico.

 

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Equipos de aire acondicionado

-Fijar la temperatura a 24 °C. El consumo eléctrico de algunos equipos aumenta hasta un 8% por cada grado inferior a ese umbral.

-Cuando el aparato esté encendido, cerrar puertas y ventanas para evitar el ingreso de aire exterior al ambiente climatizado.

-Apagar el equipo al abandonar dicho ambiente.

-Para optimizar el funcionamiento del equipo, limpiar los filtros cada seis meses.

-En caso de comprar un aparato nuevo, contrastar su capacidad de climatización con las necesidades del ambiente.

-Asegurar una conexión exclusiva, directa y segura: enchufar a una zapatilla eléctrica puede generar sobrecargas que fuerzan el motor y elevan el gasto energético.

 

 

Ventiladores

En comparación con los equipos de aire acondicionado, son más económicos y a veces combaten mejor el calor. Asimismo, estos equipos presentan tres grandes ventajas:

-En determinados ambientes, los ventiladores (preferentemente de techo) pueden mantener un adecuado confort, e incluso producir una sensación de descenso de la temperatura de entre 3 y 5° C.

-Prácticamente no necesitan mantenimiento.

-Consumen menos kilovatios por hora que un equipo de aire acondicionado: casi ocho veces menos en el transcurso de un fin de semana.

 

 

Heladera

-Reservar un lugar fresco, ventilado, alejado de hornos y otras fuentes de calor. La parte trasera y los laterales deben estar a 15 centímetros de la pared.

-Asegurar una conexión exclusiva, directa y segura: conectarla a una ficha floja, dañada o compartida con otros equipos atenta contra su rendimiento y la obliga a consumir más energía para mantener la temperatura interna.

-Verificar el estado de los burletes de las puertas. Si están en mal estado, cambiarlos para evitar la pérdida de frío.

-Si ya pasó un año desde la última limpieza en la parte trasera, volver a hacerlo para optimizar el rendimiento del aparato.

-Al abrir la heladera, hacerlo por un tiempo prudencial. Cuánto más se tarda en cerrarla, más frío se pierde y, para reponerlo, el aparato debe consumir más energía.

-Evitar guardar alimentos calientes: la heladera consume más energía para enfriarlos.

-No llenarla en exceso y bloquear las salidas internas de aire, ya que eso puede sobrecargar el sistema y exigirle más energía al compresor.

-Descongelar la heladera regularmente. El exceso de consumo comienza cuando las paredes interiores acumulan hielo.

-En caso de comprar una heladera nueva, evaluar la posibilidad de elegir un modelo ‘No frost’, cuyo sistema interno de circulación continua de aire evita la formación de escarcha.

Lavarropas

-Usar el lavarropas a la capacidad máxima aconsejada por el fabricante. No la sobrepasarse.

-Si se necesita lavar pocas prendas, utilizar el programa económico.

-Usar la cantidad correcta de jabón, así se evita realizar más de un enjuague.

-Si es posible, utilizar siempre agua fría ya que la caliente consume un 80% más de energía.

 

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Más recomendaciones

-Aprovechar al máximo la luz natural propia del verano. Abrir cortinas y levantar persianas durante el día para así reducir el encendido de la iluminación artificial.

-De iluminar la casa con lámparas incandescentes, reemplazarlas por lámparas LED que son hasta 80% más eficientes y duran más.

Evitar:

-El uso simultáneo de aparatos de alto consumo, por ejemplo, planchas y equipos de aire acondicionado.

-Uso de la plancha y el lavarropas en las franjas horarias de mayor demanda de energía eléctrica: entre las 13:00 y las 16:00, y entre las 18:00 y las 22:00.

-El consumo “vampiro” o “fantasma” de kWh. Aunque parecen apagados, los electrodomésticos en modo stand-by consumen energía. Si se desconectan, es posible ahorrar entre un 5 y un 10 por ciento.