La medida de fuerza convocada por el Frente de Unidad Docente Bonaerense tras la muerte de la vicedirectora y un auxiliar de una escuela de Moreno al explotar una garrafa, mantiene un alto nivel de adhesión, incluso por encima del registrado en los paros en reclamo de las paritarias.
Durante este viernes, la actividad en las escuelas de la Provincia de Buenos Aires es mínima. Los docentes reclaman así que el gobierno de María Eugenia Vidal responda por los hechos acontecidos el jueves, que derivaron en la muerte de Sandra Calamano y Rubén Rodríguez, y declare la emergencia edilicia y educativa.
Los gremios docentes aseguraron que la situación en la Escuela Primaria Nº 49 de Moreno había sido denunciada en reiteradas oportunidades, sin ser atendida por las autoridades pertinentes. Cabe recordar que el Consejo Escolar del distrito se encuentra intervenido por el gobierno provincial dese hace meses.
En la región el acatamiento a la medida también fue alto y desde los diferentes organismos y organizaciones se manifestaron respecto a la evitable tragedia que enluta a la educación. Así, desde el Consejo Escolar de La Costa dieron cuenta del “abandono total en que se encuentra la infraestructura de las escuelas”.
“No hay inversión y en agosto, no han comenzado todavía las obras que la Provincia comprometió en las actas acuerdo con las municipalidades y los consejos escolares”, señalaron. También en Villa Gesell el cuerpo de consejeros escolares lamentó los hechos y consideró que “demuestran el estado de emergencia en que se encuentra la infraestructura escolar en la provincia de Buenos Aires”.
Asimismo, el Consejo Escolar de Pinamar expresó su “profunda consternación”, así como su solidaridad con las familias de las víctimas y de toda la comunidad educativa.