Caso Báez Sosa: solicitan dos sobreseimientos y la elevación a juicio contra ocho imputados

La fiscal Verónica Zamboni, a cargo la investigación por el homicidio de Fernando Báez Sosa ocurrido en Villa Gesell, presentó la requisitoria de elevación a juicio contra ocho imputados acusados por homicidio doblemente agravado por su comisión por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas.

En virtud de múltiples pruebas, testimonios y peritajes, la fiscal considera que Máximo Pablo Thomsen; Ciro Pertossi; Enzo Comelli; Matías Franco Benicelli; Blas Cinalli; Ayrton Michael Viollaz; Lucas Fidel Pertossi y Luciano Pertossi, acordaron darle muerte a Báez Sosa en la madrugada del 18 de enero pasado.

En paralelo la representante del Ministerio Público Fiscal responsable de la Unidad Funcional de Instrucción Descentralizada n°6 de Villa Gesell solicitó se haga lugar al sobreseimiento definitivo de Juan Guarino y Alejo Milanesi, sobre quienes había solicitado el cese de detención en enero pasado pese a mantener la imputación de los mismos como partícipes necesarios del hecho.

 

 

En la requisitoria elevada al juez a cargo del Juzgado de Garantías nro. 6 a la que Telégrafo tuvo acceso, la fiscal también imputa a los acusados del crimen por el delito de lesiones leves en perjuicio de Ignacio Vaudagna, Juan Manuel Pereyra Rozas, Juan Bautista Besuzzo, Lucas Begide y Tomás Agustín D ´Alessandro, las personas que intentaron defender a Fernando y fueron atacadas.

En diálogo con este medio la fiscal resaltó la valoración de los videos grabados en torno al hecho y las pericias realizadas sobre esas imágenes que dividieron en 10 eventos diferentes todo lo acontecido.

“Esas filmaciones permitieron reconstruir, por fracciones de segundos, lo sucedido previamente al crimen en el interior del boliche Le Brique, lo acontecido a la salida del establecimiento cuando los agresores cruzan la calle y abordan a la víctima y el momento posterior, cuando son interceptados”, detalló Zamboni al respecto.

 

 

Fernando falleció en forma traumática producto de un paro cardíaco traumático por shock neurogénico producido por múltiples traumatismos de cráneo que generaron hemorragia masiva intracraneana intra-parenquimatosa sin fractura ósea.

En su cuerpo se observaron además múltiples escoriaciones y equimosis en región maxilar y en cara lateral de cuello, entre las que se distinguen dos improntas de pie calzado. Además su cadáver presentaba traumatismo cerrado de abdomen con laceración hepática y hematomas en intestino grueso producto de múltiples traumatismos cerrados.

Entre las lesiones registradas por los forenses, se presentó también un hemotórax izquierdo con infiltrado en ambos parénquimas pulmonares.

 

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