El cónsul estadounidense en la Argentina, Brendan O´Brien, confirmó que el trámite para conseguir la visa requerida para el ingreso en los Estados Unidos fue simplificado y que el mismo ya se puede obtener en un solo día.
«Son buenas noticias. Hicimos pruebas piloto y vimos que funciona, así que ya podemos anunciarlo», declaró O´Brien en diálogo con la prensa. El representante diplomático aclaró que es posible realizar los trámites con dos horas de diferencia entre uno y otro.
La obtención del visado se simplificó porque la transmisión de datos entre el Centro de Atención al Solicitante (CAS), donde se toman fotos, huellas dactilares y se recaba información de las personas que solicitan la visa, y la embajada, donde se verifican esos datos, se agilizaron considerablemente.
Al respecto, el jefe del área de visas del consulado, Christopher Kjelland, explicó: «Logramos que esa transmisión se realice en dos horas y eso nos permitió juntar ambas citas en un mismo día».
«Es un cambio muy bueno para los argentinos que viven en las provincias que hasta hoy enfrentaban más costos por los viajes que los residentes de la ciudad de Buenos Aires», entendió Kjelland.
En 2016, se entregaron 330.000 visas para viajar por turismo, estudio, trabajo e intercambios, cifra que batió un récord histórico de permisos para ingresar a ese país. Se estima que alrededor de 1.500 argentinos por día tramitan la visa para entrar a los Estados Unidos y las autoridades esperan este año superar los 400.000 otorgamientos.
El permiso de viaje a Estados Unidos tiene una duración de 10 años y se puede renovar por la web de la embajada en cualquier momento antes de su vencimiento e incluso una vez expirado ese plazo hasta los doce meses posteriores. Al respecto de este apartado, el cónsul agregó: «Si los viajeros usan bien su visa, es decir, si no incumplen los plazos otorgados y no cometen ningún crimen en Estados Unidos, lo más probable es que visiten el Consulado una vez en su vida y luego la renueven sin tener que venir aquí».
En los últimos meses, tras la asunción de Donald Trump como presidente estadounidense, creció la incertidumbre respecto a posibles limitaciones al ingreso de argentinos a los Estados Unidos.