En el libro Debajo de la tierra, debajo del agua, creado por dos artistas gráficos polacos responsables del exitoso Atlas del mundo, el lector descubre los secretos del mundo submarino, y en una de sus láminas, titulada Pozo Superprofundo, cuenta la espectacular historia de la perforación más extensa que haya realizado alguna vez el humano.
Durante julio pasado, la editorial Maeva, a cargo de la obra, reprodujo a través del diario El País de España otra infografía valiosísima sobre el hundimiento del Titanic, en uno de los tantos apartados con referencias históricas que han desarrollado Aleksandra Mizielińska y Daniel Mizieliński, autores de la publicación.
En esta ocasión, se aportan datos impresionantes sobre el agujero más profundo del mundo. Realizado en la zona de Kola, al norte de Rusia, demandó 22 años de tareas, desde 1970 hasta 1992 y la distancia alcanzada fue de 12 kilómetros.
Aunque nadie consiguió llegar tan lejos, el pozo no pudo completar ni la mitad de camino para atravesar la corteza terrestre, la capa de roca externa que cubre nuestro planeta y que tiene, en ese lugar del territorio ruso una espesor de 35 kilómetros.
En la actualidad, el centro de investigaciones ubicado en la península de Kola se halla abandonado por completo pero los científicos llegaron a descubrir allí rocas formadas hace más de 2 millones 700 mil años. Eso equivale a 2 mil millones de años antes de la aparición de los animales en la Tierra.
Por aquellos años, el proyecto contemplaba llegar hasta los 15 mil metros, pero sobre los 12.200, todo debió frenarse. Los especialistas esperaban encontrarse al nivel de esa profundidad con registros de temperaturas en el orden de los 100 grados. Sin embargo, los taladros utilizados no pudieron afrontar los 180 grados finalmente registrados.