Las medusas, también conocidas como aguas vivas, son cuerpos gelatinosos con tentáculos que liberan toxinas al entrar en contacto con la piel y su picadura produce ardor y picazón. Suelen aparecer cuando hay viento norte y mucho calor.
Asimismo, son comunes en nuestro mar y si bien no intentan atacar al ser humano, su picadura se genera por un contacto involuntario. Minutos después, la piel se enrojece y se hincha y puede que aparezcan ampollas.
Los especialistas advirtieron que incluso cuando se encuentran en la orilla o fuera del agua, aunque estén muertas, sus toxinas siguen activas. Por eso no se recomienda tocar ni pisar a las aguas vivas.
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Consejos en caso de sufrir una picadura
-Salir del mar
-No rascarse ni refregar la zona afectada.
-Lavar la herida con solución salina o agua de mar. No con agua dulce.
-Colocar frío local, paños con vinagre o bicarbonato de sodio.
-Chequear si persisten restos de aguas vivas en la piel. Observar con buena luz y de encontrar restos, quitarlos con una pinza.
-Consultar con un profesional en caso de que la herida persista y sea dolorosa por más de 2 horas.
Las aguas vivas son comunes en nuestro mar y aparecen cuando hay viento norte y calor.
Síntomas
-Dolor y ardor local.
-Enrojecimiento del área y aparición de ampollas.
-En algunos casos, fiebre, dolores musculares y articulares.
Ante cualquier duda o síntoma por picadura de aguas vivas, dirigirse al centro de salud más cercano.