Bajo esta inquietud, la Fundación Ecológica de Pinamar presentó un proyecto de ordenanza en el Concejo Deliberante y ya mantuvo dos reuniones en la comisión de Ecología para avanzar en la temática y buscar la mejor forma del cuidar el entorno natural.

Desde la organización ambientalista destacaron que el cordón medanoso del partido de Pinamar cumple un objetivo primordial por ser un reservorio de agua dulce, “única fuente de abastecimiento de agua potable de toda la comunidad”. Además, constituye un sector de la playa fundamental para evitar erosión y de contención de las grandes tormentas, además de ser un paisaje natural y atractivo turístico por excelencia.

En este sentido, la Fundación solicitó a través de su proyecto que “se contemple una figura de preservación con un uso sostenible en el cordón medanoso, en las zonas ya delimitadas por la urbanización y llegando en el resto hasta los 300 metros”.

Además, se busca prohibir la ampliación o apertura de la avenida costanera o calles perpendiculares al mar que afecten la zona en cuestión, como también la circulación de vehículos, por su impacto ambiental negativo. Asimismo,  pretenden una reformulación del Código de Faltas por incumplimiento de las normas implementadas en la zona protegida.

La propuesta incluye la remediación del cordón medanoso en lugares que ha desaparecido por acciones del hombre, así como considerar obras de infraestructura hidráulicas para recuperar el agua pluvial, cuya desembocadura provoca erosión y contaminación.

Entre otras acciones, la Fundación Ecológica propone rediseñar los accesos a terrenos privados o UTFs en el cordón medanoso para generar el mínimo impacto ambiental y acondicionar los actuales accesos peatonales con pasarelas.