715 de 950 alcaldes catalanes apoyan el referéndum independentista del 1 de octubre
La consulta pautada para dentro de dos semanas fue suspendida por el Tribunal Constitucional de España, en el marco de la citación cursada por la justicia a los representantes comunales de Cataluña que apoyan la votación.
Durante el último viernes, el presidente Mariano Rajoy le había advertido a la dirigencia catalana: «Nos van a obligar a lo que no queremos llegar. El Estado va a seguir actuando. No subestimen la fuerza de la nación española. España es una gran nación», los desafió el Ejecutivo.
«No subestimen la fuerza del pueblo de Cataluña», le respondió este sábado Carles Puigdemont, presidente de la Generalitat (la institución de autogobierno de Cataluña), en un acto organizado junto a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, para mostrar apoyo a los 715 ediles favorables a la consulta independentista investigados por la Fiscalía.
El actual proceso de los independentistas catalanes comenzó a instalarse con fuerza en la región en 2010. Tres años después, los partidos independentistas de Cataluña pactaron realizar un referéndum, que se celebraría el 9 de noviembre de 2014. Ante las denuncias del resto de los partidos catalanes y españoles, el gobierno de Cataluña renunció a llamarle referendo y pasó a denominarlo proceso participativo. Para evitar exponerse a una inhabilitación judicial, los gobernantes dejaron que lo organicen voluntarios. La votación se celebró con urnas de cartón. Aunque los partidos no independentistas terminaron por boicotearla y llamaron a sus bases a no participar, al final sufragaron 2,3 millones de personas de un censo estimado de 5,4 millones de catalanes: un 80.76% vota a favor de la independencia.
A lo largo de las últimas décadas, los independentistas catalanes se han esforzado en reunir multitudes en manifestaciones convocadas siempre el 11 de septiembre, el día de Cataluña, jornada que conmemora la caída de Barcelona, en 1714, ante las tropas de la corona borbónica durante la Guerra de Sucesión Española.
Ahora a pesar de las protestas de los partidos en la oposición y las advertencias del gobierno, abogados, jueces, empresarios e instituciones europeas, los partidos independentistas aprobaron el 7 de septiembre pasado la ley para convocar un referéndum el 1 de octubre. Lo hicieron después de que la oposición abandone sus escaños.