Semanas atrás y debido a la rotura en una contención se produjo un desborde de efluentes cloacales de Pinamar sobre la ruta 11 en terrenos pertenecientes a la comuna de General Madariaga, una problemática sobre la que se han registrado varios episodios desde el año 2022 a la actualidad.
La situación mereció la intervención en su momento de diversos organismos, entre ellos del gobierno bonaerense a través del entonces Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenibles (OPDS); la Autoridad del Agua (ADA); y la policía ecológica.
Ante la nueva situación detectada desde el municipio de Pinamar le solicitaron a Aubasa que realice la limpieza de las alcantarillas que se encuentran ubicadas en el trayecto que va desde la rotonda de Pinamar hacia la de Ostende.
El problema empeoró cuando la empresa en cuestión, para llevar adelante dicho trabajo, realizó un nuevo canal de cinco metros de ancho que provocó que los residuos líquidos (sin ningún tipo de tratamiento) se volcaran todos sobre el territorio madariaguense.
Efluentes: Madariaga acusó a Pinamar de causar un “grave daño ambiental”
En busca de una solución y para dejar asentado dicho problema, con la presencia de un escribano, desde la municipalidad de General Madariaga se tomaron muestras de los efluentes cloacales vertidos desde Pinamar y se labró el acta correspondiente.
Al lugar asistió el intendente, Carlos Esteban Santoro, el secretario de Legal, Técnica y Administrativa, Hernán Ferraro el director de la delegación, Santiago Santoro, así como también algunos de los vecinos afectados.
