Luego de siete días de paro, el propietario de la empresa Montemar, Eduardo Vecchio, confirmó en diálogo con Telégrafo desde la ciudad de Dolores que el Ministerio de Trabajo abrió este jueves la instancia obligatoria de conciliación en el conflicto que mantiene la compañía de transporte, que no presta servicio en la región desde el viernes pasado. El gremio ya se notificó, pero aún no acató la medida por lo que no se restableció la circulación de colectivos.

“Se dictó la conciliación obligatoria el miércoles en Mar del Plata para El Rápido del Sud y este jueves, en Dolores, se dictó la conciliación obligatoria para Montemar” describió Vecchio, luego de varios días de duros cruces con el gremio de la UTA y negociaciones hasta último momento con los delegados pinamarenses.

A pesar de que la orden del Ministerio de Trabajo se emitió el jueves, recién durante el mediodía de este viernes la UTA se notificó. «Evitó notificarse durante todo el día de ayer y todavía no acataron la conciliación», recalcó Vecchio, quien además aseguró que se le pagó 10 mil pesos a cada trabajador «a pesar de que no se levantó el paro».

 

El conflicto en ambas compañías se inició el viernes pasado luego de que los trabajadores no recibieran el pago de salarios del mes de noviembre. Finalizado el último día hábil de cobro, la UTA dictaminó un inmediato cese de actividades.

Vecchio contó que la semana pasada le explicó la situación a delegados y empleados y pidió unos días para poder resolver los inconvenientes financieros de la empresa: “Les dije que podíamos abonar parte de los salarios y que si continuaban trabajando en no más de cuatro días se saldaban los haberes, pero así y todo, el gremio determinó ir al paro”, describió.

La situación se volvió más tensa luego de que los trabajadores de El Rápido del Sud emitieran un comunicado en el que manifestaban su intención de continuar en operaciones, con una dura aclaración: era la UTA quien se los impedía. En Pinamar y la región, los empleados afectados son poco más de 90.

“Entiendo que en Montemar la situación es similar, muchos trabajadores me han escrito pidiéndome trabajar. El problema acá es que con estos seis días de paro, son varios los que perdieron dinero. Entre viáticos y otros ingresos diarios, podrían haber recibido más de $4.000”, sentenció Vecchio.

El representante de ambas firmas detalló los motivos financieros que derivaron en el conflicto actual: “No se cobraron los subsidios en las fechas establecidas, ese dinero cubre una parte de los salarios, no toda, pero sabemos que en pocos días ingresará y eso permitirá cancelar los sueldos”, describió.

“Para la situación que se vive en el país y la crisis que existe en el rubro del transporte, me parece que no estamos tan fuera de contexto en pagar unos días más tarde. No fue que no se quiso abonar sueldos ni que evitamos dar fechas de cobro. Eran sólo unos días” concluyó Vecchio, disconforme con la resolución adoptada por la UTA.