Un año de prisión para una mujer por besar a su esposa en la estación de tren
El hecho no sucedió en ninguna de las atrasadas naciones donde aún en 2019, la homosexualidad es un delito, sino que acaba de acontecer en un juzgado de Capital Federal. Este viernes, Mariana Gómez fue condenada a un año de prisión y a pagar las costas del juicio en su contra por besar a su esposa, Rocío Girat, en la estación Constitución.
Justo en el día en que se conmemoran los 50 años de la brutal represión sufrida por la comunidad gay en el pub Stonewall Inn de New York, lo que provocó una revuelta sin precedentes y marcó a partir de ese año la celebración del Orgullo Gay, el Tribunal Oral Criminal Nº 26 falló en contra de Mariana por considerarla responsable del delito de resistencia a la autoridad y lesiones graves.
La causa comenzó en 2017 cuando la pareja se encontraba en la estación de Constitución. Estaban fumando un cigarrillo, se besaron, y fueron increpadas por personal de Metrovías. El problema habría sido el cigarrillo, pero Mariana y su esposa sostienen no solo que no había cartel indicativo alguno que señalara la prohibición de fumar, sino que otras personas también lo estaban haciendo.
Tras apagar el cigarrillo y comenzar a retirarse, un efectivo de la Policía Metropolitana intentó detener a Maritana para identificarla y labrarle un acta por fumar en un lugar prohibido, algo que ni siquiera está previsto en la legislación vigente.
Una mujer policía llegó al lugar y por lo insólito de la situación comenzó un forcejeo que terminó con la reducción de Mariana y 7 horas de detención en la que según su abogado recibió un trato denigrante y vejatorio.
A Mariana la trataron de varón y a la pareja como “amigas” a pesar de que ambas recalcaron que estaban casadas. En el mismo lugar de los hechos hasta les pidieron el certificado de matrimonio -otra muestra de discriminación-, documento que llevaban consigo y que fue exhibido, pero nada frenó el accionar policial injustificado.
Luego vendrían 21 meses de procesamiento que tuvieron su corolario este viernes con la condena a un año de prisión. El fallo será apelado y según recalcó el abogado de Mariana en diálogo con la prensa nacional, de ser necesario llegarán hasta la Corte Suprema de Justicia y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Hace 5 años, el padrastro y el abuelastro de Mariana fueron condenados a 8 años de prisión en un juicio abreviado por abusar sexualmente durante más de una década de ella y sus hermanas. Se les otorgó prisión domiciliaria y uno de ellos aún cuenta con este beneficio.
El padre de Rocío, Marcelo Girat –exsuboficial de la Armada-, fue condenado en 2014 a 14 años de prisión por haberla violado sistemáticamente durante 4 años, incluso en la Base Naval Argentina de Mar del Plata. En principio también se le concedió prisión domiciliaria y en 2015 fue finalmente revocada por lo que cumple su condena en cárcel común.