Pinamar: se cayó el acuerdo y se dilata el aumento de tasas

Hace poco más de 10 días, la mayoría de los bloques opositores y el oficialismo de Pinamar habían logrado un acuerdo para avanzar el modificación del Código Tributario y llevar el módulo a un valor de 19 pesos, lo que representa un aumento promedio en las tasas del 35,5%. No obstante, no hubo consenso en la Asamblea de Concejales y Mayores Contribuyentes y se abrió un impasse, al menos, hasta el 12 de febrero.

El punto de conflicto fue el Presupuesto municipal 2020, que ingresó al Concejo Deliberante durante la misma mañana en que se celebró la Asamblea. Sin demasiado tiempo de análisis, la oposición pidió un plazo para evaluar el proyecto y advirtió que no se evidenciaban los cambios solicitados en cuanto al ajuste de la planta política y la transparencia en el uso de fondos públicos.

Además, desde el oficialismo se propuso una nueva modificación a la ordenanza que establece la suba en el módulo para fijar descuentos y sobretasas por zonas. Desde el arco opositor, si bien agradecieron la buena voluntad, plantearon que no se podía vislumbrar el impacto.

Sin malicia

La concejal informante del oficialismo fue Camila Merlo, quien con autocrítica realizó un gran giro en el discurso. Es que hasta el momento desde la gestión del intendente Martín Yeza se había insistido en que los problemas financieros de la Comuna se basaban en el desfasaje provocado entre la inflación y el valor del módulo, a instancia del arco opositor, al cual acusaron sistemáticamente en los últimos años de desfinanciar al municipio.

No obstante, Merlo en esta oportunidad señaló que  el hecho de que el módulo haya quedado por debajo de la inflación no fue “por maliciosidad”. “Hemos entendido que uno trata de estar a la altura de lo que entiende que la gente necesita y muchas veces está por debajo de las necesidades del municipio. No es culpa de nadie, es un proceso que se fue dando a lo largo del tiempo”, recalcó.

El cambio de postura duró apenas unos días ya que este miércoles  el intendente Yeza realizó una conferencia de prensa y volvió a cargar contra la oposición por la falta de acuerdo.

 

 

En el marco de la Asamblea, Merlo anunció además el ingreso del presupuesto y la intención de abocarse al tratamiento del mismo, con el planteo de algunas modificaciones solicitadas por la oposición a lo largo de las mesas de trabajo desarrolladas junto al Ejecutivo y el Sindicato de Trabajadores Municipales de Pinamar.

“El intendente entendió que requería generar nuevas secretarias y para eso, un aumento en la planta política, pero desde los bloques entendimos que necesitábamos recortes por la situación económica y por eso el presupuesto viene a reflejar lo que los bloques opositores han pedido”, detalló.

En este sentido, mencionó que los fondos que iban a ser destinados al Juzgado de faltas de Pinamar irían al aumento de becas y el regreso de los montos para el fortalecimiento legislativo, como también un tope de 75 millones de pesos a las horas extras –misma suma que en 2019- y un límite de las contrataciones por quienes tienen cargos electivos de hasta 50 personas.

La oposición exige transparencia

Desde el arco opositor, la concejal de Propin Gabriela Ferretti pidió rápidamente establecer un cuarto intermedio amplio, al menos hasta el 12 de febrero. “No podemos seguir trabajando un aumento de módulo si no tenemos estudiado todos los bloques el presupuesto”, advirtió.

En esta línea, pidió que el presupuesto contenga “el ajuste al importe propuesto y el recorte del gasto político”. “Hay que acompañar la realidad que vive no solo nuestro municipio, sino también la provincia y el país”, resaltó.

Desde el Frente de Todos, Laura Vigliecca evidenció su indignación con el oficialismo al señalar que nuevamente “nos encontramos con un proyecto de modificación que aparece en el mismo momento de la sesión”. Anunció así el apoyo al cuarto intermedio hasta poder hacer un “análisis profundo acerca de cuáles son los números reales de este municipio”.

La edil aseguró que los funcionarios que responden a Yeza no dicen “cómo el municipio que tiene el presupuesto per cápita más alto de la zona ha llegado a la situación en que hoy se encuentra Pinamar”.

Al respecto, y a modo de ejemplo, aseguró que 25 días antes de que la Comuna no pudiera pagar los sueldos a los municipales, se transfirieron supuestos “fondos ociosos” a las cuentas del gobierno de la Provincia, en ese momento aún gobernada por María Eugenia Vidal, y que lo mismo sucedió a principios de noviembre. “Hablamos de 22 millones de pesos”, sentenció.

Luego mencionó otra serie de irregularidades detectadas y se preguntó “¿Cómo están administrando el municipio? ¿Cómo sabemos que este municipio necesita un módulo de 18 pesos, de 19 o de 25? Lo que hace falta es transparentar las cuentas y el manejo de fondos públicos y ajustar en donde se debe”.

Desde Unidad Ciudadana, en tanto, Carlos Conti se manifestó prácticamente en la misma línea y agregó que “nunca hubo intención de realizar ajuste y austeridad en el gasto en la planta política”.

Respecto del límite a las contrataciones mencionado por Merlo, el concejal aseguró que “no se observa” y que el límite de 50 es por mes. “Hablamos de 30 millones al año. Son 5 veces lo que se presupuestó para el Juzgado de Faltas”, enfatizó, mientras pidió que directamente se eliminen este tipo de contrataciones dado que “el Ejecutivo lo utiliza para precarizar a la gente o para poner arbitrariamente a sus amigos”, algo que recientemente denunció el Sindicato.

La oposición concluyó así que las modificaciones planteadas no eran suficientes y que debían darse un tiempo para continuar con el análisis del valor del módulo para el 2020 –y el consecuente aumento de tasas- y el presupuesto municipal. La moción para abrir un cuarto intermedio al menos hasta el 12 de febrero fue aprobada por unanimidad.