En el marco del programa Pro-Huerta, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) junto a la municipalidad de Pinamar realizará la entrega de semillas con previa inscripción a través de un formulario virtual. Además, en esta oportunidad las capacitaciones se podrán realizar online.
Cabe señalar que la modificación en el funcionamiento del programa en Pinamar, al igual que en el resto de los distritos, es consecuencia del aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto por el Gobierno nacional dad la pandemia de Covid-19.
La solicitud de semillas para la huerta correspondientes al período otoño-invierno ya se puede realizar al hacer click aquí, llenar el formulario y enviarlo.
Los interesados deberán incluir apellido y nombre, número de DNI, dirección, número de teléfono y número de integrantes de la familia, entre otros datos solicitados.
COVID-19 | ¿Cómo funciona la distribución de semillas de ProHuerta?
as semillas son un recurso estratégico en el trabajo junto con agricultores familiares, instituciones y familias en situación de vulnerabilidad social.
Conocé los criterios actuales 👉🏽 https://t.co/ozUD8dXcbX pic.twitter.com/YiGlNg5BKs
— ProHuerta (@prohuerta) April 7, 2020
Una vez completado este paso, con las medidas preventivas pactadas previamente, y durante el transcurso de la semana, se desarrollarán las entregas de las especies para la siembra de la temporada otoño-invierno, a lo que se sumará material informativo de manera online junto a los beneficios de tener tu huerta en casa.
Las especies de semillas son habas, arvejas, acelga, lechuga, achicoria, cebolla, perejil, rábano y espinaca.
Sobre el Pro-Huerta
El Pro-Huerta es una política pública, implementada por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación a través del Plan Nacional de Seguridad Alimentaria, que permite realizar un abordaje integral de las diferentes realidades que plantea el vasto territorio argentino.
Este abordaje territorial e integral llega a las familias productoras a través de la promoción de la producción agroecológica, tanto para el autoabastecimiento, la educación alimentaria, la comercialización en ferias y mercados alternativos y el rescate de especies, saberes y costumbres populares, con una mirada inclusiva que valora y potencia la diversidad.
Esta práctica productiva promueve el uso de técnicas amigables con el medio ambiente, el aprovechamiento de recursos locales y el uso de tecnologías apropiadas que mejoran el hábitat y la calidad de vida de las familias productoras y todo su entorno y toda su comunidad.