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Peligra el colegio Adesmia Incana en Villa Gesell: piden subvención del Estado

La situación del Instituto Adesmia Incana de Villa Gesell, caracterizado por su mirada ambiental, es delicada desde hace algunos años, pero en el contexto de la pandemia de Covid-19 se ha agravado. Las autoridades renovaron el pedido de subvención al Estado y advirtieron que hay peligro de cierre.

Al establecimiento, que abrió sus puertas en 2012 con una perspectiva ambiental e inclusiva, asisten 66 alumnos en el nivel primario y otros 33 en el secundario. El mismo está ubicado en Paseo 125 y avenida 13.

Según explicaron las autoridades, debido a la poca cantidad de estudiantes y que a las familias se les hizo difícil afrontar el pago de las cuotas, desde el año 2016 se solicita la subvención de parte del Estado. “Somos la única institución de gestión privada en Villa Gesell que no posee subvención”, sentenciaron.



Desde ese año, se han enviado numerosas notas ante la Jefatura Regional para que la institución pueda acceder a una subvención estatal, pero no han obtenido respuestas. Incluso en 2019 se mantuvo una reunión con el exdirector general de Cultura y Educación bonaerense, Gabriel Sanchez Zinny, y el extitular de Educación de Gestión Privada, Juan Cruz Rodríguez, quienes se comprometieron a dar una pronta respuesta, “la cual nunca llegó”, según recalcaron.

En 2020, el Instituto Adesmia Incana reiteró el pedido y en enero el intendente de Villa Gesell, Gustavo Barrera, viajó a La Plata con una carpeta presentada a la actual directora general de Cultura y Educación Agustina Vila. “Y aún seguimos sin respuesta”, agregaron las autoridades.

 

 

“La situación es crítica. La escuela corre riesgo inminente de cierre en el presente ciclo lectivo y la subvención no llega. No nos dieron el ATP y no nos dan respuesta del pedido de aporte estatal”, remarcaron luego

La solicitud vuelve a la escena tras el anuncio del gobernador Axel Kicillof sobre el adelanto de $340 millones de pesos a las escuelas públicas de gestión privada para el pago de sueldos, el cual solo está destinado a los establecimientos que ya cuentan con una subvención del Estado.



“Acá no solamente se cerraría una escuela, sino que también se perdería un proyecto educativo excepcional que apunta a la inclusión educativa de calidad, comprometida con el ambiente, y con la sociedad”, concluyeron desde Adesmia Incana.

 

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