Una investigación conjunta entre la DDI Dolores y la SubDDI VIlla Gesell logró desarticular una banda oriunda de Córdoba que cometía violentas entraderas en la costa atlántica. Serían los autores de un hecho ocurrido en Pinamar a finales de julio y que tomó relevancia nacional por la violencia.
De hecho, las fuentes consultadas por Telégrafo indicaron que ese robo fue el puntapié inicial de la investigación y caída de la banda. Identificaron a unas 20 personas y hay tres prófugos con pedidos de captura internacional.
Cabe recordar que el empresario José Ignacio Alba y su esposa fueron sorprendidos en su casa de Pinamar por un grupo de delincuentes. Se llevaron 10 mil dólares y más de 600 mil pesos, entre otros elementos de valor, mientras amenazaron y golpearon a sus víctimas.
Esta causa, a cargo del fiscal Juan Pablo Calderón, fue calificada como robo doblemente agravado por haberse cometido con arma, en poblado y en banda. También la acusación es por privación ilegal de la libertad y defraudación por el uso ilícito de tarjetas de débito y crédito.
El tiempo con tiempo para Mar Chiquita, Villa Gesell, Pinamar y La Costa. https://t.co/R1krmgVTIv pic.twitter.com/4AP0FC2ruj
— Telégrafo (@telegraficos) September 22, 2022
Tras arduas tareas investigativas, finalmente se concretaron 17 allanamientos en la provincia de Córdoba. Se pudo identificar a los integrantes de la banda -más de 20 personas- y hay tres prófugos con frondosos antecedentes.
Se trata de Denis Leonel Rivas Arias (30 años), Fabrizio López Altamirano (20) y Franco Amado (32). Sobre ellos pesa un pedido de captura nacional e internacional.
Violentas salideras
En esta línea, se comprobó que los malvivientes cometían los hechos en la provincia de Buenos Aires -en la costa atlántica y el conurbano bonaerense- y luego huían a Córdoba.
La particularidad de su accionar, además del robo mediante la modalidad de entradera, es la violencia que ejercían sobre las víctimas.
Además, se descubrió que un integrante de la banda tenía un familiar en la policía de Córdoba, el cual brindaba información vital para evitar a la Justicia. Este efectivo fue allanado y bajo investigación. Más allá de las actuaciones en la provincia de Buenos Aires, se lo sumarió en asuntos internos de la policía de Córdoba.
En el marco de los allanamientos se identificó a 20 personas y se procedió a la recuperación parcial del botín. Se secuestraron así computadoras, cadenas de oro, alhajas, 4.000 dólares, 200.000 pesos y 50 celulares. También incautaron marihuana, un vehículo de alta gama con pedido de secuestro activo utilizado en el hecho origen de la investigación e indumentaria de la Policía Federal Argentina.
Los operativos de la DDI Dolores y la SubDDI Villa Gesell contaron con la colaboración de la delegación Policía Federal de la ciudad de Córdoba y personal policial de la comunal de Pinamar; comisaría 1° Pinamar; DAIC Castelli e Inteligencia Criminal.
También colaboraron la municipalidad de Pinamar, de Villa Gesell y Madariaga mediante el aporte de imágenes de las cámaras municipales de seguridad.