En la primera jornada del juicio contra ocho rugbiers por el asesinato de Fernando Baéz Sosa prestaron su testimonio los padres de la víctima y al terminar, la mamá aseguró: “No los veo arrepentidos”.
La declaración de María Graciela Sosa Osorio conmovió este lunes en los tribunales de Dolores.
“No comprendo, y nunca aceptaré, cómo chicos de la edad de Fer le hayan hecho esto. Lo atacaron por la espalda, lo tiraron por el piso, le reventaron la cabeza…ese cuerpito que yo tuve nueves meses en mi panza”, aseguró.
Su testimonio estuvo cargado de llanto y emoción, incluso en dos oportunidades la jueza que preside el tribunal le preguntó si estaba en condiciones de seguir.
Juicio a los rugbiers: para la querella el crimen fue una “carnicería humana”
“No tuvieron piedad. Le llamaban ‘negro’. Era mi príncipe. Lo educamos tanto y que de un día al otro aparezcan en su camino. ¿Con qué derecho le arrebataron la vida?”, preguntó Graciela delante de los acusados por el homicidio de su hijo.
Además, la mamá de Fernando dio cuenta de lo difícil que es su día a día tras el crimen. “Yo ya soy una mujer acabada, sin vida, sin ganas de vivir. No sé de dónde saco la fuerza, pero sigo adelante”, sentenció.
Los padres de Fernando Báez Sosa junto a su abogado Fernando Burlando (Fotos Ricardo Stinco).
“Solo busco justicia”
Cabe recordar que los ocho rugbiers acusados del crimen cometido en Villa Gesell en 2020, afrontan desde este lunes el juicio oral por homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas’.
Se trata de Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano (21), Ciro (22) y Lucas Pertossi (23).
Los imputados estuvieron presente en la primera jornada del proceso judicial en su contra, en el cual la querella adelantó que pedirá prisión perpetua.
A su término, los padres de la víctima se retiraron de los tribunales de Dolores agradecidos con las muestras de apoyo que recibieron. En este marco, Gracias aseguró que “ningún padre se merece lo que le hicieron a Fernando”. “Sentí como madre que no estaban arrepentidos. No los veo arrepentidos. Solo busco justicia”, concluyó.
