El tiempo con tiempo: pronóstico extendido para Villa Gesell, Pinamar y La Costa
Un nuevo fin de semana otoñal se inicia en el calendario occidental del mes de abril y, como ocurre habitualmente, Telégrafo te acerca el pronóstico del clima para la región de Villa Gesell, Pinamar y La Costa por los próximos siete días.
Para este viernes se espera una máxima promedio en 19 grados, un viento del sector este a velocidad moderada que irá en rotación al norte en horas de la noche. El cielo, por su lado, mostrará una nubosidad que irá en descenso conforme avance la jornada.
A lo largo del sábado habrá un aumento de la temperatura máxima promedio, que llegará a los 22º sostenida en la continuidad del viento norte durante todo el día. El sol podrá brillar prácticamente sin oposición de nubes.
El domingo será de transición. Aunque la máxima del día permanecerá en el orden de los 22º y el viento seguirá llegando desde el norte, volverá la nubosidad, que será abundante, y anticipará lo que está pronosticado para 24 horas después.
Durante el lunes la región vivirá una jornada de precipitaciones, de principio a fin y por períodos ocasionalmente abundantes. La máxima promedio se aguarda en 18º y la inestabilidad llegará además con una brusca rotación del viento al sector sur, que además incrementará su velocidad.
Para el martes, según lo que anticipan los satélites, se reducirá considerablemente la posibilidad del desarrollo de más lluvias, aunque el viento del sur arribará a la región a alta velocidad. La máxima promedio para esa jornada se pronostica en 17º y el cielo se mostraría mayormente despejado.
De no modificarse lo anticipado por los sitios especializados en meteorología, el miércoles será un día con nubosidad nuevamente en crecimiento, viento leve del sector sur y máxima promedio en 17º.
Sobre el jueves 16 de abril, lo que se sabe hasta el momento es que las ráfagas de aire finamente rotarían al sector noreste, lo que generaría un cambio en la tendencia de las temperaturas máximas promedios, que podrían verse elevadas apenas en un grado. Para ese entonces, el gigante amarillo podría no tener oposición de nubes.
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