Recibieron el año con piedras, botellazos y balas de goma
El año nuevo en Villa Gesell arrancó mal. En los alrededores de avenida Buenos Aires y playa, se desarrolló una fiesta a la que se acercaron unos 5 mil jóvenes, sin ningún tipo de control. Todo terminó de la peor manera cuando comenzaron los enfrentamientos, primero entre los propios asistentes con piedrazos y botellazos, y luego con los efectivos que intervinieron ante los desmanes. No hubo detenidos, según confirmaron fuentes policiales a Telégrafo.
En el lugar se montó una carpa, con equipos de sonido y luces, sin aparente autorización municipal ni condiciones mínimas de seguridad. Según los testigos, se llegaron a congregar unas cinco mil personas y a medida que fue avanzando la noche y corría el alcohol, el ambiente comenzó a tensarse en disputa por el espacio.
Alrededor de las 5 de la madrugada, cuando las botellas empezaron a volar contra los edificios linderos y los autos estacionados a sufrir daños, efectivos de la policía antimotines se hicieron presentes para intervenir. Lejos de calmar los ánimos, dispararon balas de goma y arrojaron gases lacrimógenos contra la multitud. Hubo corridas y más destrozos en autos y los edificios cercanos, como también algunos robos. No obstante, no se registraron detenidos, aunque sí algunos heridos.