Con críticas y polémica, se aprobó el Plan de Ordenamiento de Villa Gesell

En la última sesión del Concejo Deliberante de Villa Gesell, convocada de manera extraordinaria, se trató sobre tablas el proyecto del Ejecutivo para instaurar un Plan de Ordenamiento Urbano. Fue avalado por el bloque oficialista y el edil Miguel Cisneros, y fue ampliamente criticado por Juntos por el Cambio y Crear.

La jornada del miércoles en el Deliberativo local fue intensa y ajetreada. La primera sesión extraordinaria fue convocada por el arco opositor pero no prosperó: rápidamente el oficialismo dejó sin quórum el encuentro.

La oposición buscaba abordar un proyecto para declarar la emergencia turística, comercial, gastronómica y hotelera; una interpelación a la secretaria de Salud municipal y la creación de una comisión investigadora vinculada a “irregularidades del Código de Ordenamiento Urbano”.

Una hora y media después, los concejales volvieron a reunirse para tratar el temario del bloque oficialista, con el Plan de Ordenamiento Urbano de Villa Gesell a la cabeza. El vocero fue el concejal del Frente de Todos Sergio Coronel, quien explicó los pormenores de la propuesta del Ejecutivo.

 

 

Cabe aclarar que la intención de sancionar un nuevo Código de Ordenamiento Urbano -el cual establece usos de suelo y pautas de crecimiento, construcción y desarrollo urbano- es de larga data, pero el proyecto finalmente aprobado había sido presentado por el Gobierno local apenas 24 horas antes del tratamiento.

Coronel explicó que “en Villa Gesell no teníamos previsibilidad para desarrollos urbanísticos”, ya que “todo debía pasar por una excepción”. Sobre la nueva propuesta, aseguró que se encuentra integrada la normativa provincial, nacional y municipal correspondiente y que una vez sancionada “va a producir una ruptura en la concepción urbanística de nuestra ciudad”. 

El concejal agregó que con el Plan de Ordenamiento Municipal “se le da previsibilidad a todo el territorio y se deja reserva necesaria para futuras inversiones urbanísticas”, al tiempo que ofrece “condiciones de incentivo y de desincentivo en determinadas zonas”, así como la generación de distritos comerciales y distritos para reconversión hotelera y gastronómica.




Por último recordó que tras la convalidación del Concejo Deliberante y antes de su entrada en vigencia, el proyecto debe ser revisado y aprobado también por organismos técnicos de la provincia de Buenos Aires.

Postura de la oposición

Por el lado de la oposición, la concejal de Juntos por el Cambio Clarisa Armando cuestionó desde las formas hasta el proyecto en sí. En principio remarcó que la iniciativa a tratar era diferente a la analizada durante todo el 2020.

Luego criticó otros aspectos de la propuesta como la ubicación elegida para el desarrollo de viviendas sociales, la ausencia de una “evaluación ambiental estratégica” y las previsiones en cuanto al agua potable.

“Las consecuencias de este plan las van a padecer las generaciones que vienen atrás nuestro. Son cómplices e irresponsables con el destino de nuestra ciudad”, sentenció la edil. Desde la oposición también se hizo hincapié en lo sucedido con el COU en 2019.

Vale recordar que el Ejecutivo había elevado un proyecto en este sentido, pero en medio del análisis se denunció que el mismo beneficiaba en una maniobra inmobiliaria al secretario de Planeamiento municipal, Gerardo Galli, autor de la iniciativa.

 

 

Este tema se reflotó ahora, especialmente porque Galli continúa al frente del área. En este sentido, Hernán Luna (Crear) afirmó que “hay grandes intereses y hemos sentido la presión de esos intereses”. 

El concejal entendió que las modificaciones realizadas en la propuesta “tuvieron que ver con irregularidades” y apuntó a Galli y al Gobierno local por sostenerlo en el cargo.

“Este no es el camino desde un punto de vista técnico, medioambiental, ético y político, hace falta más debates y más modificaciones”, enfatizó Luna.

El debate se extendió por más de dos horas y finalmente terminó a los gritos y con cuestionamientos hacia la presidencia del Cuerpo -que tuvo que llamar al orden en más de una oportunidad- por el manejo de la sesión y el uso de la palabra de los concejales de la oposición.

La votación terminó con siete votos negativos correspondientes a los ediles de Juntos por el Cambio y Crear, y 9 positivos del bloque oficialista y el concejal Cisneros para dar por aprobado el proyecto.




Otros proyectos y falta de quorum

Tras el tratamiento de la iniciativa para instaurar un nuevo Plan de Ordenamiento Urbano en Villa Gesell, se aprobó por unanimidad el Estatuto del Guardavidas Municipal y la moratoria para regularizar planos.

Al abordarse la prórroga de la emergencia en materia de transporte, el encuentro se quedó brevemente sin quórum por el retiro de los concejales de Juntos por el Cambio, Crear y Cisneros, aunque finalmente este último regresó y se habilitó la votación. 

El expediente fue aprobado solo con los votos oficialistas (Cisneros se inclinó por la negativa) y luego sí -minutos antes de la medianoche- el plenario quedó definitivamente sin el quorum necesario para sesionar.

 

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