El gigante Amazon compra los estudios de Metro Goldwyn Mayer
Por 8.450 millones de dólares (6.910 millones de euros), la compañía Amazon ha concretado la compra de los estudios cinematográficos Metro Goldwyn Mayer (MGM).
La empresa de Hollywood, fundada en 1924, registraba una deuda que fue incluida en la operación de adquisición que hizo la compañía estadounidense de comercio electrónico y servicios de computación con sede en la ciudad estadounidense de Seattle.
La empresa de Jeff Bezos, una de las primeras grandes compañías en vender bienes a través de Internet, se abre paso con fuerza en Hollywood al sumar a su plataforma una biblioteca con 4.000 títulos en un momento donde los canales digitales luchan por hacerse con los mejores contenidos.
El acuerdo incluye a las exitosas franquicias de James Bond y Rocky pero deja fuera títulos clásicos que ayudaron a forjar la legendaria reputación de la MGM como El Mago de Oz, Cantando bajo la lluvia y Lo que el viento se llevó, entre otras. Los derechos de las producciones anteriores a 1986 son propiedad de Warner.
El acuerdo, no obstante sí incluye otras ganadoras del Oscar como El silencio de los corderos, Toro salvaje y Thelma & Louise, además de 17.000 programas de televisión. Entre ellos series que han triunfado con la crítica y la audiencia como Fargo o El cuento de la criada.
Solo en Estados Unidos son más de 200 millones las personas que están abonadas a la versión Prime de Amazon, un servicio que lanzó en febrero de 2011 en Estados Unidos poniéndose como objetivo competir en el mercado donde Netflix era líder y al que recientemente han entrado gigantes como Disney y Paramount.
La operación aún debe conseguir el visto bueno de los reguladores estadounidenses en un momento donde Amazon ha llamado la atención de Washington por supuestas prácticas monopólicas.
La compra de MGM llega pocas semanas después de la fusión entre AT&T, dueña de los estudios Warner, con Discovery, otro gran paso que ha cimentado la rápida transformación de la industria y que daba un nuevo paso hacia otra época dorada del streaming.
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