Luego del sorpresivo amparo que buscaba frenar la obra de pavimento en la localidad de Camet Norte, la medida judicial quedó sin efecto. La municipalidad de Mar Chiquita presentó toda la documentación requerida y el reclamo se desestimó.
Cabe recordar que el último viernes comenzaron los trabajos para asfaltar las calles que recorre el colectivo en la localidad costera; así como los accesos a los establecimientos educativos.
No obstante, la jornada se vio opacada al conocerse la aceptación de un amparo por parte de la Justicia marplatense que ordenaba detener la obra. La medida había sido solicitada por una vecina que evidentemente desconocía el proceso de licitación pública y el reclamo de la comunidad.
Apenas se conoció la resolución judicial, los vecinos de Camet Norte se organizaron primero con una petición online para exigir que continúe la pavimentación; y luego planificaron una protesta para este mismo lunes.
El amparo había generado no solo el rechazo vecinal, sino también el repudio político ante la clara necesidad de que el pavimento llegue a esta zona.
#BastaDeBarro: vecinos de Camet Norte pelean por el pavimento ante un amparo. https://t.co/sQqv1k2ZrB pic.twitter.com/ZdeMTMlX5C
— Telégrafo (@telegraficos) June 12, 2022
Asimismo, este sábado la municipalidad de Mar Chiquita emitió un comunicado para informar que iba a dar inmediata respuesta a lo requerido judicialmente. En este línea, remarcaron que la documentación se encontraba disponible, con el estudio de impacto ambiental incluido, dado que para adjudicar la obra se realizó una licitación pública.
“La documentación y el procedimiento cumplió y cumple con todos los requisitos legales y técnicos establecidos por ley”, enfatizaron.
Sigue la obra
Finalmente este lunes, la misma jueza que había dictado la resolución -aún aceptando que no era de su competencia, emitió un nuevo fallo.
En el mismo, entendió que la municipalidad de Mar Chiquita cumplió con lo requerido y se estableció que el procedimiento se ajustaba a la normativa vigente. Por eso, la magistrada decidió que no existían motivos para mantener la prohibición y dispuso levantar la disposición anterior.
Expeditivo y feliz final para una comunidad como la de Camet Norte que lucha por mejoras en su calidad de vida al impulsar obras de esta envergadura; y encontrar eco y escucha en el Gobierno municipal.
