La Cámara de Apelaciones de Dolores confirmó que los nueve policías acusados del crimen de un detenido en una comisaría de San Clemente del Tuyú deberán enfrentar un juicio oral.
La resolución la adoptaron los jueces Lía Regina Raggio y Daniel Rezzonico, integrantes de la Sala II del tribunal de ese departamento judicial.
En un fallo de más de 30 páginas al que tuvo acceso Télam, los magistrados confirmaron la decisión del juez de Garantías 4 de Mar del Tuyú, Diego Olivera Zapiola. En octubre, el magistrado elevó a juicio la causa por la que están imputados cinco hombres y cuatro mujeres, todos ellos miembros de la Policía Bonaerense.
Los efectivos están acusados de asesinar a Alejandro Nicolás Martínez mientras permanecía detenido en la comisaría 3° de San Clemente.
Por su parte, los camaristas rechazaron los planteos presentados por sus defensas. Consideraron que “las circunstancias argumentadas” no alcanzan “para desvirtuar la decisión” de Olivera Zapiola.
Muerte en la comisaría de San Clemente del Tuyú: lo que reveló la segunda autopsia
De ese modo, a los principales acusados del crimen, José Pereyra (35), Christian Rohr (31) y Maximiliano Munche (48), se los juzgará como coautores del delito de “homicidio triplemente agravado por alevosía, ensañamiento, por el concurso premeditado de más de dos personas y por haber sido cometido por miembros de una fuerza de seguridad abusando de sus funciones”.
También deberán enfrentar un juicio oral los policías de San Clemente Laura Chiarullo (36), Evelyn Garófalo (28), Jaqueline Mansilla (30), Carla Cantarella (30), Sandro Mujica (35) y Miguel Boulos (54). Están acusados de intervenir en el hecho en calidad de “partícipes secundarios”.
El caso
La muerte de Martínez se produjo en la madrugada del jueves 18 de noviembre del 2021, luego de su detención. Se lo aprehendió por provocar daños en el Gran Hotel Fontainebleau de San Clemente, donde se hospedaba.
A partir de la intervención inicial del fiscal Pablo Gamaleri, de la Unidad Funcional de Instrucción 11 descentralizada de La Costa, se practicó la autopsia del cadáver, que reveló que había fallecido a causa de una “asfixia mecánica” y que además había sufrido golpes y lesiones.
A raíz de las pruebas recolectadas, dos días más tarde se detuvo a los policías y los alojaron en distintas dependencias penitenciarias provinciales.
Tras estas medidas, el ministro de Seguridad provincial, Sergio Berni, y las defensas de los efectivos cuestionaron los resultados de la autopsia, por lo que se dispuso una nueva pericia.
La misma, realizada nuevamente en el Instituto de Ciencias Forenses de Lomas de Zamora, confirmó los resultados de la primera. Incluso, estableció que el cuerpo presentaba lesiones que no habían sido notificadas en el análisis inicial.