En la última jornada de esta primera semana del juicio a ocho rugbiers por el caso Báez Sosa, los testigos se abocan a reconstruir lo sucedido en los momentos posteriores al atroz crimen.
Uno de los principales testimonios de este viernes fue el de la recepcionista de un hotel de Villa Gesell ubicado en la misma cuadra del boliche ‘Le Brique’.
Según sostuvo Andrea Ranno ante el tribunal de Dolores, mientras dejaban la escena del crimen escuchó a uno de los agresores decir “le rompí toda la jeta, viste”. También “le llené la jeta de sangre”.
Además, la mujer aseguró que a los rugbiers se los vio “riendo” y “festejando entre ellos”. “Todos se sentían partícipes de ese festejo”, enfatizó y agregó “venían muy exaltados, muy contentos, contentísimos y felices”.
En un tramo de su declaración, cuando reprodujo los textuales de uno de los agresores, la testigo incluso miró a los padres de Fernando -sentados en la sala- y les pidió perdón.
La testigo reconoció a al menos dos de los imputados -Máximo Thomsen y Matías Benicelli- y recalcó que cuando llegó el personal de la Delegación Departamental de Investigaciones al lugar habló con la policía.
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Lo que resta para hoy
El juicio por el caso Báez Sosa continúa con la declaración del comisario mayor Lucio Pintos, Jefe de la Jefatura Departamental Pinamar. Fue quien llamó al papá de Fernando, Silvino Báez, para contarle lo que le había pasado a su hijo. Además, estuvo en el lugar cuando detuvieron a los rugbiers.
Luego será el turno de la dueña de la casa que alquilaban los imputados en Villa Gesell, así como peritos y policías.
En su mayoría serán los policías que participaron del allanamiento donde se detuvo a los imputados.
De esta forma, se intentará reconstruir quién o quiénes de los acusados les dio el nombre de Pablo Ventura, el remero inocente de Zárate al que involucraron y que derivó en que estuviera injustamente preso por el caso unos días.
“Hemos hecho un cronograma de cómo desarrollar la prueba en la medida en la que ha avanzado la causa. Han escuchado todos los testigos presenciales, hoy empezamos con todo lo que es la escena de la aprehensión y el material a levantar, y posteriormente serán los peritos de rastros, químicos, de ADN y médicos”, explicó uno de los fiscales, Juan Manuel Dávila.