Faro Querandí: “Para tirarnos con municiones están las elecciones, acá se terminó el chiste”

Emiliano Ezcurra, vicepresidente de Parques Nacionales, expuso en el Senado sobre el proyecto para convertir al Faro Querandí en un área protegida y en su discurso se ocupó de los concejales geselinos de Cambiemos que votaron en contra de la iniciativa. “No podemos seguir con esta discusión infantil”, sentenció con el intendente Gustavo Barrera sentado a su lado.

La escena fue tal vez impensada en estos tiempos políticos que corren, pero se dio el último viernes en el Senado, en una audiencia convocada para debatir los alcances de la propuesta que busca convertir al Faro Querandí en Parque Nacional. En una misma mesa coincidieron oficialistas y opositores para defender una iniciativa que se ha encontrado con una insólita resistencia en el Concejo Deliberante de Villa Gesell.

El proyecto fue impulsado por Barrera, pero rápidamente obtuvo el aval de la comunidad especializada y del Gobierno nacional de Mauricio Macri.

Durante su intervención en el Senado, Ezcurra no anduvo con vueltas y apuntó directamente a los concejales de su propio partido: “Este tema no da para más. El desafío es volar por encima de las nubes, de las riñas y batallas que vemos desde las ONG y ahora desde el Estado”, señaló el funcionario de Cambiemos.

Ezcurra llamó a “lograr de acá a 10 años, que el manejo de un área protegida provincial no guarde diferencia o sea la mínima posible, con un área protegida nacional” e insistió con el reto a los ediles: “No podemos seguir con esta discusión infantil”.

“El presidente Macri aceptó la donación de muchísimas tierras, unas 155 mil hectáreas en los Esteros del Iberá: un Parque nacional con cuatro núcleos separados, que se integra con un área protegida provincial y no pasa nada, no se cae el mundo, al contrario, es un fortalecimiento a las estrategias de conservación de la Argentina”, enfatizó.

El vicepresidente de Parques Nacionales pareció hablarle directamente a los concejales geselinos de Cambiemos durante todo su discurso. Al desestimar los argumentos localistas respecto de la entrega de tierras, instó a “tomarnos este asunto con el patriotismo que amerita” y rápidamente adjudicó el conflicto a cuestiones políticas. “Tenemos la recta final del acto electoral para tirarnos con municiones, pero en estos temas se acabó el chiste y la chicana”, disparó.

“Caminando por los médanos del Faro Querandí, la lagartija va a entrar en un área provincial, un área nacional, va a ir a una reserva de Defensa y le va a importar un pito quién la creó. Este proyecto nace como una locomotora y se encuentra con un conflicto político que no le permitió arrancar. Le estamos dando una segunda oportunidad para que esto despegue, no la desaprovechemos”, concluyó.

 

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