25 de mayo: por qué es una fecha clave en la historia argentina

Cada año, el 25 de mayo se conmemora en Argentina la conformación del primer gobierno patrio en 1810. Más allá de los actos oficiales, el feriado -aunque este año sea domingo- invita a reflexionar sobre el inicio del proceso independentista.

Se trata de una de las fechas más importantes del calendario cívico argentino. Ese día, en 1810, se conformó en Buenos Aires la Primera Junta de gobierno, tras una semana de tensión política que terminó con la destitución del virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros.

 

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Este hito marcó el inicio de un largo proceso de independencia que modificaría de forma definitiva la relación entre las colonias americanas y la Corona española.

Aunque la declaración formal de independencia ocurrió en 1816, los sucesos del 25 de mayo de 1810 son recordados como el primer paso hacia la soberanía nacional. A partir de allí, comenzaron a surgir gobiernos locales que, si bien mantenían formalmente la fidelidad al rey Fernando VII, en los hechos empezaban a trazar un camino autónomo.

 

 

La Revolución de Mayo y su contexto

La Revolución de Mayo no fue un hecho aislado. Estuvo influenciada por una serie de procesos internacionales, como la Revolución Francesa, la independencia de Estados Unidos y, especialmente, la invasión napoleónica a España en 1808, que dejó vacante el trono español. En ese contexto, muchas ciudades del Virreinato del Río de la Plata comenzaron a cuestionar la autoridad virreinal y a reclamar formas de autogobierno.

En Buenos Aires, la presión popular y el accionar de un sector criollo ilustrado llevaron a la convocatoria de un Cabildo Abierto el 22 de mayo. Allí se discutió el destino del virrey y, finalmente, el 25 se oficializó la creación de un nuevo gobierno, integrado por representantes locales.

La Primera Junta estuvo presidida por Cornelio Saavedra e incluyó figuras como Mariano Moreno, Manuel Belgrano y Juan José Castelli, entre otros. Si bien en sus primeros documentos juraba lealtad al rey, en los hechos comenzó a tomar decisiones autónomas, organizando expediciones militares al interior y sentando las bases de una nueva institucionalidad.

 

 

Celebraciones, símbolos e identidad

Desde 1811, el 25 de mayo comenzó a celebrarse como una fecha patria. Con el paso del tiempo, se volvió una jornada cargada de símbolos: el Cabildo, las escarapelas, el locro, las escuelas adornadas de celeste y blanco, y los actos oficiales encabezados por autoridades municipales, provinciales y nacionales.

Pero más allá de la liturgia escolar o de los desfiles, el 25 de mayo condensa una pregunta fundamental: ¿cuándo empieza una nación? La fecha remite a un momento fundacional, aunque también recuerda que la independencia fue un proceso complejo, con avances, retrocesos y disputas internas.

En conclusión, el 25 de mayo no es solo un día de descanso o un feriado más. Es una oportunidad para recuperar los debates que dieron origen a la Argentina, y para pensar qué significa, aún hoy, hablar de libertad, autogobierno y soberanía.


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