Durante el mediodía de este viernes, y en el marco de un quite de colaboración, los trabajadores municipales de Pinamar marcharon en señal de protesta por el ajuste que lleva adelante el gobierno de Martín Yeza.

A los recortes en el área de salud, que llevó a la suspensión del servicio de guardia en la salita de Valeria del Mar, se suman 160 puestos laborales en riesgo que corresponden a trabajadores con contratos temporales, pero que se desempeñan hace al menos dos años en el ámbito municipal.

En el marco del plan de lucha que lleva adelante el Sindicato de Trabajadores Municipales de Pinamar, la movilización partió desde la sede del gremio, en Júpiter y Medusas, y llegó hasta las puertas de la municipalidad.

Ante la ratificación de las medidas de ajuste por parte de la gestión, los representantes sindicales anunciaron un quite de colaboración progresivo que comenzó este miércoles y finaliza este viernes en el turno de la noche con cuatro horas de inactividad. Sin embargo, en caso de que el conflicto no encuentre su cauce y se efectivice el cese de los contratos, las acciones podrían recrudecerse, especialmente al tener en cuenta que todavía no comenzó la discusión paritaria para el sector.