Por el avance del coronavirus los JJ. OO. de Tokio se disputarán sin espectadores

Apenas dos semanas y media después de que el comité organizador de los Juegos Olímpicos de Tokio anunciara la decisión de permitir el ingreso de público japonés a las diversas competencias hasta un máximo de 10 mil personas, el gobierno del país asiático prorrogó el estado de emergencia en su ciudad capital por el aumento de los contagios y la organización decidió dar marcha atrás: la máxima fiesta deportiva del planeta se celebrará finalmente sin espectadores.

La variante delta del virus —detectada por primera vez en la India y altamente contagiosa— está provocando desde finales de junio un repunte de contagios en la capital nipona, y ya supone dos tercios de las infecciones totales registradas en Japón.

 

 

Luego de que en marzo pasado ya se tomara la decisión de vetar la presencia de aficionados extranjeros, este jueves el gobierno japonés, el Comité Organizador de los juegos, el Comité Olímpico Internacional (COI), el Comité Paralímpico Internacional y la jefatura metropolitana de Tokio se reunieron para definir si la decisión tomada del aforo máximo de 10.000 espectadores seguiría vigente o no. Ante la posibilidad de un nuevo rebrote masivo en la urbe, prosperó el no a la aceptación del público nacional.

Estaba previsto que el próximo domingo la capital japonesa pusiese fin a unas medidas de emergencia adoptadas el mes pasado, pero después de que este miércoles se contabilizasen 920 nuevas infecciones de covid-19 (la cifra más alta desde el 13 de mayo, cuando en medio de la cuarta ola en ese país se registraron 1.010), el gobierno ha decidido dar un paso atrás y decretar el estado de emergencia del 12 de julio al 22 de agosto.

 

 

Investigadores del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas japonés calcularon que, de no decretarse medidas estrictas, los casos diarios durante la celebración de los juegos se dispararían a más de 1.500 para finales de julio y a 2.000 en agosto, lo que podría provocar la saturación del sistema sanitario.

En Japón se espera la participación de 11.000 deportistas olímpicos y 4.400 paralímpicos de 200 países y, según los organizadores, el 80% de los atletas y el personal deportivo estará vacunado. Hasta la fecha, en la nación anfitriona se han administrado más de 50 millones de dosis, con solo un 14,51% de la población completamente vacunada.

 

 

La prohibición de la presencia de aficionados en las competiciones es una nueva mala noticia para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, pospuestos un año por el estallido de la pandemia y cuya organización se ha convertido en una auténtica carrera de obstáculos.

El relevo de la antorcha, que se inició a finales de marzo en la prefectura nororiental de Fukushima, llegará este viernes a Tokio también en medio de nuevas restricciones. Alrededor de 1.300 de los portadores de la llama inicialmente convocados se quedarán sin participar en el recorrido por la capital nipona.

 

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