El personal de salud en Pinamar, “saturado” y con sueldos a la baja

Los problemas en el sistema de salud pública en Pinamar se extienden en el tiempo: a las denuncias durante el invierno pasado por situaciones de vaciamiento en el servicio de las guardias médicas, se sumaron este verano durísimos cuestionamientos de profesionales contra la operatoria del gobierno del intendente Martín Yeza y serios inconvenientes que experimentan en sus haberes los profesionales y trabajadores del área del municipio, quienes reclaman por la falta de diálogo de las autoridades locales.

Luego de numerosas manifestaciones y medidas de fuerza desarrolladas a lo largo de los últimos meses, los afiliados locales a la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la provincia de Buenos Aires (Cicop), anunciaron una nueva concentración y protesta para el sábado 6 de febrero próximo, luego de que su última liquidación de sueldos los dejara con menos ingresos que los percibidos en el mes anterior.




En diálogo con Telégrafo, Simón Khoury, presidente de la seccional pinamarense de Cicop, confirmó la decisión de volver a evidenciar públicamente la precaria situación laboral del municipio. “El sábado vamos a concretar una nueva movilización, ahora en la última liquidación de los sueldos, nos sacaron un montón de beneficios y cobramos menos que el mes pasado”, detalló.

En esa línea Khoury precisó: “El 12% de aumento otorgado en negro el mes pasado, ahora se pasó al blanco, entonces con los descuentos recibimos menos dinero. El sueldo de enero fue más bajo que el de diciembre, increíble. Además dejaron de pagar el bono de $5.000”, detalló el trabajador pinamarense.

Lo que más preocupa al gremio es que desde el gobierno de Yeza “no nos atienden el teléfono, ya no nos dan más atención”. “No les importa nada, lograron un aumento de tasas que no se ve reflejado en el sueldo de los empleados” sentenció el referente sindical del distrito.

 

 

Con un universo de entre 1.200 y 1.300 empleados municipales, de los cuales 450 trabajan en el área de salud, la situación en torno a las prestaciones sanitarias públicas dejan mucho que desear en Pinamar.

Consultado por la modalidad de trabajo, Khoury reconoció: “La vocación está, no podemos trabajar a medio ritmo en salud, no es un trabajo de oficina. Acá no se perjudica al gobierno de turno, acá hay muchos profesionales agotados, realmente muy cansados”, describió.

En ese sentido el dirigente ahondó: “Las guardias están con muchos faltantes. En pediatría en vez de dos profesionales hay en muchas oportunidades uno solo, y a veces ni siquiera uno. Los clínicos que tienen que ser tres o cuatro, muchas veces son dos. Faltan médicos y no les importa. Estamos muy mal”, consideró.

 

 

Respecto a la situación en torno a la pandemia, Khoury reconoció que los porcentajes de internación cayeron a partir de que los infectados por covid-19 leves ya no quedan hospitalizados. Sin embargo, dejó una salvedad a tener muy en cuenta: “No se pueden utilizar camas porque no hay personal. Adicionaron 30 el año pasado pero por más que se quiera no se pueden utilizar, faltan recursos humanos”, reiteró.

“Vos lo escuchás en reportajes a Yeza y estamos en el mejor hospital del mundo. Pero por más camas que haya el personal es el que está saturado, con mucha carga laboral y ahora un sueldo más bajo. Con todo lo que implica atender a un paciente con coronavirus, el otro día una médica clínica tuvo que asistir a 15 infectados. Las prioridades del gobierno están en otro lado, pasan por la bicisenda o el paseo de avenida Bunge. Serán valederas, pero en el medio de una pandemia deberían ser otras”, concluyó Khoury.

 

Lo más visto